7 de septiembre de 2022
Imágenes recuperadas de los teléfonos celulares de Fernando Sabag Montiel y de su novia Brenda Uliarte, posando con la pistola Bersa Thunder calibre 32, tomadas hace algunos meses, hacen crecer la certeza de que hubo un plan premeditado para atacar a la vicepresidenta Cristina Fernández Kirchner, dejaron entrever fuentes de la investigación a distintos medios. Las fotos de la tarjeta de memoria del aparato del brasileño, de 35 años, no resultaron afectadas por el reseteo de fábrica cuando fue manipulado por alguno de los efectivos que participaron del traslado de las pruebas. Para los investigadores, detrás de los detenidos hay una pequeña organización que, sino elaboró el plan magnicida, pudo haber instado a la pareja a actuar. Colabora en esta percepción haberse detectado la presencia de ambos en cercanía de la vivienda de CFK en días previos al atentado, en lo que parece ser un trabajo de inteligencia previa.