6 de septiembre de 2017
El callejón es una galería de arte al aire libre, un centro cultural con murales del afamado escultor y muralista Salvador González Escalona, quien transformó, en la década de los 90, esta callejuela abandonada a su suerte. Escalona plasmó los orígenes africanos de la identidad cubana en las paredes de esta calle de 200 metros donde se realizan talleres para niños, obras de teatro y charlas culturales. Con los años, el antiguo pasaje –ubicado en el barrio Cayo Hueso, en Centro Habana, a pocas cuadras del Malecón– se fue transformando en refugio y epicentro de la cultura afrocubana. Un rincón donde cada domingo se dan cita los cultores de la religión yoruba, que desde el mediodía bailan y cantan al son de los ritmos afros. El estremecedor toque de los tambores se funde con los cantos tradicionales, con líricas modernas y contestatarias del hip hop y con bailes en los que se invoca a los orishás (deidades africanas) hasta entrar en trance. Un trance habanero.