21 de julio de 2024
Según datos de la Fundación Protejer, la entidad que agrupa a las principales cámaras empresarias del sector textil, en el año se perdieron alrededor de 5.000 puestos de trabajo y las suspensiones ya rondan las 10.000, pese a que se trata de un entramado fundamentalmente pyme que es reticente a los despidos por las dificultades que tienen para capacitar.
La caída en el uso de la capacidad instalada es otro indicador de una coyuntura de crisis: en mayo (último dato conocido) apenas el 41,4 por ciento de la maquinaria, servicios y estructura del sector estaba siendo utilizado, detalló Página12. En tanto, en enero se llegó a uno de los niveles más bajos de la serie histórica de 36,7 por ciento dado que los empresarios, en su mayoría pymes, frenaron la actividad de manera precautoria. La utilización de la capacidad instalada –medida por Indec- se mantiene en mínimos históricos en lo que va de 2024.
El presidente de la Fundación Protejer, Luciano Galfione, señaló que “la crisis de la pandemia fue peor porque paramos a cero. Fue mayor la caída de la actividad pero la reacción del Estado fue rápida y la economía rebotó luego de una crisis de seis meses: de marzo a noviembre. Ahora llevamos siete meses en caída, sin vestigio de indicadores favorables, ni asistencia del Estado. Por eso veo un panorama más complicado”.