14 de septiembre de 2024
Con un documento difundido la semana pasada y el acto en Merlo la expresidenta ocupó el centro de la escena y polemizó con Javier Milei. Miradas contrapuestas sobre la economía y la política.
Honoris Causa. La exmandataria recibió el galardón en la Universidad Nacional del Oeste.
Foto: @CFKArgentina
Cristina Fernández de Kirchner volvió a ocupar el escenario público tras la presentación de un documento crítico de las poíticas implementados por el Gobierno nacional que también tenía cuestionamientos al peronismo. La expresidenta habló nuevamente este viernes, ante una multitudinaria concurrencia en el predio de la Universidad Nacional del Oeste (UNO), en la localidad bonaerense de Merlo, donde fue distinguida con un doctorado Honoris Causa. Entre los fundamentos para el galardón estaban las políticas que desarrolló en sus gestiones desde la Casa Rosada.
La de este viernes 13 fue una continuidad del debate iniciado el 6 de septiembre pasado con el presidente Javier Milei, a tal punto que la mayor parte de la «clase magistral» consistió en responder punto por punto a la réplica del presidente en Mendoza de siete días antes. A medida que Fernández desgranó sus argumentos sobre el texto desgrabado de lo que el mandatario había dicho ante empresarios en la provincia cuyana, fueron apareciendo antiguos tópicos en el discurso cristinista. Como el recordatorio de las consecuencias dramáticas para la economía de la deuda contraída durante la gestión de Mauricio Macri, y quiénes habían sido los protagonistas de aquella decisión, entre ellos, el actual ministro de Economía, Luis Caputo. Algo que el propio Milei había mencionado en ese dramático 2018, como se pudo ver en un video que mostró la dos veces presidenta.
La convocatoria había generado expectativa fundamentalmente por los cruces ásperos con Milei en estos días, lo que implica que ambos se colocan el sayo de ser los grandes contendientes de esta época. Dejan en un lugar secundario, al menos por ahora, al fundador del PRO y a gran parte de sus seguidores, que cada día parecen más diluidos dentro del espacio ultraderechista que propone Milei, al que se decidieron a «ayudar» casi a libro cerrado desde el Congreso.
El canuto
Ya desde el nombre de esta charla, «Sigue siendo la economía bimonetaria, estúpido», Cristina Fernández siguió «picante» contra el primer mandatario. Y así lo venía empujando desde su cuenta de la red X, muy activa por estos días.
El documento divulgado la semana anterior insistía en algo que Cristina Fernández viene advirtiendo desde hace bastante y que en Merlo fue ampliamente dilucidado: que el gran problema del que la dirigencia vernácula tiene que hacerse cargo es que el país se maneja con doble moneda. Que el peso es el que se usa para el intercambio cotidiano, mientras que para la compra de bienes lo normal es acudir al dólar.
Este viernes añadió otro condimento: que la propuesta de Milei, que «ya no habla de dolarización sino de competencia de monedas», es en última instancia que se produzca una dolarización endógena. Para lo cual, dijo Cristina Fernández, el Gobierno busca que la clase media utilice «el canuto» que pudiera tener atesorado para pagar impuestos, seguros y gastos de supervivencia.
La exvicepresidenta recordó que ni bien asumió su primer mandato tuvo que enfrentar la protesta contra la Resolución 125, que comparó con el levantamiento de los militares carapintada contra Raúl Alfonsín, pero duró mucho más tiempo. Fue una excusa para recomendar al jefe de Estado que «largue a Milton Friedman» y se dedique a administrar el país. También tuvo un momento para advertir que teorías económicas como la de la escuela austríaca «se chocan contra la pared en Argentina».
Recordó también que el veto al incremento a los jubilados se produjo gracias a un puñado de diputados radicales en una movida que calificó como muy propia de la casta que el presidente jura querer combatir. De allí que censurara fuertemente la represión a las marchas de protesta, especialmente el ataque contra una niña con gas pimienta, y sobre todo a las mentiras en torno a quiénes fueron los autores de semejante hecho. Felicitó, además, a los legisladores que habían votado por amplia mayoría por un incremento en el presupuesto universitario, cuando desde el Gobierno afirmaban que sería otra decisión vetada.
En otro momento de la clase, la exmandataria se dio tiempo para explicar su postura en el primer documento sobre la nueva realidad en el mundo del trabajo y pidió a la dirigencia de la CGT que reconociera que los tiempos cambiaron. «Tenemos otro mundo de trabajadores informales que han quedado sin representación. No es imputación, es descripción. Debemos pensar en ellos. Tenemos que sentarnos en la mesa para cranear, para saber cómo hacemos para representar al conjunto de los trabajadores de la República Argentina».
Para el final se guardó las críticas a los brutales contenidos sexuales a los que suele recurrir en sus exposiciones Javier Milei. «La palabra de un presidente es muy importante. Los grandes no se horrorizan, pero los niños prestan atención. Y tenemos un niño que ha desaparecido hace casi noventa días. Y un diputado que está detenido por tráfico sexual».
A todo esto, Milei estaba en el predio de la Sociedad Rural Argentina (SRA) coronando al Gran Campeón Macho Hereford de la Exposición del Centenario de esa raza bovina. Los medios que lo acompañan mostraban la presentación del presidente junto con la consecuencia para los usuarios de la huelga de trabajadores de Aerolíneas Argentinas. Y le daban difusión al adelanto de que el mandatario iba a vetar la ley de financiamiento universitario que acababa de aprobar por abrumadora mayoría el Senado.
Polémica en las redes
Esta charla en Merlo se realizó luego de una semana en la que ambos dirigentes se dedicaron fuertes cruces en las redes sociales. Así se refirió el presidente al documento de Cristina Fernández.
Ya arriba del ring, CFK no dudó en responder:
Ante una nueva chuza de Milei, Fernández de Kirchner volvió a responder y cerró el intercambio con un tono similar al usado por el presidente.