14 de enero de 2014
« Para componer un personaje hay que leer, leer y leer el libro. No importa cuántas veces. Se trata de soñarlo, vivirlo, ir por la calle con él. Vas reflexionando sobre el personaje hasta que se convierte en algo tuyo. Ahí aparece el hambre por interpretarlo. En casa tengo un atril donde pongo los objetos que considero que puede utilizar mi criatura.»