17 de junio de 2022
De manera sorpresiva, la Corte Suprema de Justicia de la provincia de Santa Fe le quitó el expediente de la convocatoria de acreedores de la agroexportadora Vicentin al juez civil y comercial de Reconquista Fabián Lorenzini y suspendió todos los plazos y trámites del concurso, en lo que se conoce como «avocamiento». La medida se produce en el marco de un intrincado proceso judicial que por un lado investiga penalmente a los responsables de la empresa por fraude y por el otro avanza en un concurso comercial por las millonarias deudas con instituciones bancarias y acreedores privados registrada desde unos días antes del cambio de gobierno, en 2019. La semana pasada, el presidente del directorio, Omar Scarel, fue imputado por desobediencia de dos órdenes judiciales que inhibían de disponer de las acciones de empresas vinculadas y vender sus activos. Quedó en libertad tras una caución de 500.000 dólares. La decisión del máximo tribunal santafesino se produjo a días del 30 de junio, cuando vencía el período de excepción de la convocatoria de un concurso por deudas de 1.575,4 millones de dólares. Los supremos ahora buscan que Lorenzini explique las decisiones que derivaron en las ofertas de pago. La primera fue rechazada por casi todos los acreedores; la segunda, aceptada por poco más del 50% pero sin alcanzar las mayorías que prevé la ley. Entre sus acreedores figuran el Banco Nación y el Provincia.