24 de abril de 2013
«La dictadura no sólo hizo daño al hacer desparecer gente, sino que además destruyó el tejido social que debemos reconstruir todos los argentinos para que nuestra patria pueda llegar a un futuro promisorio», señaló Alba Lanzillotto (miembro de Abuelas de Plaza de Mayo) en la charla «Memoria, verdad y justicia» que organizó la filial Caballito de Credicoop como parte del ciclo de conferencias abiertas a la comunidad impulsada por la comisión de asociados del banco cooperativo. Junto con Lanzillotto participaron del encuentro Mirta Baravalle (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), Osvaldo Barros (quien estuvo detenido en el centro clandestino que funcionó en la ESMA durante la dictadura) y Pablo Spinella (escritor e hijo de Miguel Ángel Spinella, desaparecido desde 1978).
«A los 30.000 desaparecidos no los recuperamos físicamente, pero los recuperamos con su presencia permanente, con esa memoria que impusimos y que es presente y futuro», dijo Baravalle, quien relató cómo era vivir en plena dictadura sin conocer el paradero de un familiar. En igual sintonía, la intervención de Spinella se centró en la relación entre historia y memoria. «Es imprescindible revisar el pasado, hacer justicia, no olvidar y, sobre todo, no distorsionar la historia», destacó. Al cierre, Barros subrayó «la incesante lucha de los organismos de derechos humanos por saber la verdad de lo que pasó».
También estuvieron presentes Raúl Aprea, consejero zonal de Credicoop y Marcelo Pascua, gerente de la filial Caballito.
