Cooperativismo

Fascismos del viejo continente

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En la sala Raúl González Tuñón del CCC Floreal Gorini se llevó a cabo la conferencia Europa y la ultraderecha, en un contexto político y económico signado por las «políticas de austeridad», el autoritarismo, las migraciones, la xenofobia y el Brexit. Los conferencistas de la charla fueron Gerhard Dilger, director de la Fundación Rosa Luxemburgo (FRL) de Buenos Aires; Andreas Thomsen, director de la FRL de Bruselas; y Ana Grondona, socióloga e investigadora del CCC.
«Desde hace un buen rato ya hay un malestar profundo en Europa y en la Unión Europea con las políticas de austeridad que el establishment –visto como tecnócrata y neoliberal y que domina el Parlamento y a la Comisión Europea– está implementando», dijo Dilger. En esa línea, agregó: «Eso empieza, ciertamente, con más fuerza con la crisis en 2008, la crisis del euro, la crisis financiera, pero se ha profundizado, y el caso más sonado en los últimos años ha sido ciertamente el chantaje al que fue sometido en 2014 Grecia por, justamente, la troika, o sea, representantes del Banco Central Europeo, de la Comisión Europea, del FMI y con un peso decisivo del Gobierno alemán».  El malestar popular en Europa se tradujo electoralmente en un notorio avance de partidos de ultraderecha, de los populistas de derecha y de los euroescépticos. Thomsen hizo hincapié en esto, ofreciendo información «de contexto» sobre los desarrollos políticos que llevaron a dicha situación, como la crisis del euro (2010), que comenzó con la crisis de la financiarización de los bancos (2008) y quiebras, y la crisis de las deudas públicas de los gobiernos. Según subrayó Thomsen, la Comisión Europea, Alemania y Francia aplicaron recetas neoliberales y el resultado fue el «fortalecimiento de un régimen de austeridad» que destruyó el sistema de seguridad social de varios países de la región. En paralelo a esta crisis se destruyeron también muchos de los partidos socialdemócratas tradicionales, como el Partido Socialdemócrata de Grecia, PASOK. Y emergió una nueva fuerza política «que se aprovechó de esas fuerzas que desaparecían, porque fue una combinación de partidos fascistas tradicionales, de partidos nuevos, partidos reformados, una combinación y eso es lo que nosotros llamamos los partidos populistas de la derecha». En la caracterización que hizo Thomsen de estos populismos del viejo continente, afirmó que todos se caracterizan por ser nacionalistas, racistas y antifeministas y por tener intenciones de reformar el sistema democrático.   


Sala Tuñón. Grondona, Dilger y Thomsen: el avance de la derecha europea.

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