1 de diciembre de 2017
Daniel Campione, historiador e investigador del CCC Floreal Gorini, brindó una conferencia bajo el título «Antonio Gramsci, la Revolución Rusa, los consejos de fábrica y su papel como dirigente comunista», que tuvo lugar en la sala Jacobo Laks del CCC.
«Hay personas que escribieron libros de centenares de páginas al mismo tiempo que eran militantes y dirigentes políticos, no fue el caso de Gramsci, Gramsci hizo una acción política muy intensa no acompañada por una producción intelectual de largo aliento, por la escritura de libros. Después, por el brutal corte de la cárcel, ahí desarrolla, en estado de borrador, un pensamiento de mayor aliento, de mayor proyección en el tiempo, de mayor atención al plano internacional», sostuvo el investigador. Según Campione, su escritura permite analizar su propio contexto histórico, signado por un bloque de poder en el norte de Italia y otro en el sur, pero que se articulaban en una gran alianza de clase dominante que mantenía sometidos a obreros y campesinos, denominados como «clases subalternas». «En Gramsci, –subrayó– tenía el sentido de una situación de sometimiento más global que la que denota el término explotación, que tiene una tradición más económica. Lo de la subalternidad para Gramsci era una situación de sometimiento, de dominación que abarcaba aspectos económicos, por supuesto, pero también sociales, culturales y políticos».
