8 de octubre de 2022
Alma adentro
Mimi Maura
Canary Hifidelity
Mimi Maura es portadora de una cualidad de la que pocos pueden dar cuenta: de alguna manera se mantiene al margen de la escena, moviéndose bastante pero en silencio, como si portara el don de la invisibilidad. Pero cada vez que edita un disco nuevo no hay manera de que las luces, la atención y la escucha no apunten hacia ella. Y eso acaba de suceder: Alma adentro es el flamante nuevo disco de la cantante puertorriqueña que llegó a estas playas hace más de dos décadas.
Bien vale echar un vistazo al largo y vasto recorrido de la artista nacida bajo el nombre de Midnerely Acevedo: desde aquellos hits de sus primeros años, por caso «Yo no lloro más» o «Casas en llamas», a sus colaboraciones; a los grandes discos que fueron Mirando caer la lluvia (2007) y Días de sol (2010); a su rescate del cancioneros de los 60 y los 70 del ska, rocksteady y soul; a sus trabajos en parcería con su compañero Sergio Rotman en bandas como El Siempreterno y Los Sedantes.
O sea: hay allí, además de una prepotencia de trabajo, una búsqueda, un sello propio. Llevaba poco más de una década sin editar material nuevo e inédito: en 2012 había publicado La herida, un trabajo dedicado a homenajear a su padre Mike Acevedo, reconocido compositor y cantor boricua; y en 2016 lanzó Stormy 60’s – Soul Tunes Inna Reggae Style junto con Los Agrottones, donde reversionaron clásicos de estilo de esa década. Todo lo demás habían sido álbumes en vivo y recopilatorios.
Así las cosas, Alma adentro, que se comenzó a gestar antes de la pandemia, es un muestrario, un catálogo ideal y renovado de su sonido, de la música de Mimi Maura. Un registro atemporal o, mejor dicho, atado a un único tiempo: al suyo propio. Hay que remarcar que Mimi Maura es, sobre todo, más intérprete y cantora que compositora. Ella misma ha insistido sobre ese punto en sus últimas entrevistas. Su timbre, su voz enlazan directamente con los 60 y los 70. O sea, con la época dorada de cierto tipo de voces. Por ello se destaca ese tipo de drama, ese tipo de brillo en su decir. En definitiva, se crió escuchando esa vertiente musical en la radio y en su casa, junto a su padre.
El reciente Alma adentro encumbra aún más su figura dentro del panorama actual. El disco transita por los géneros abordados desde siempre por Mimi, por caso el reggae con «Hoy el sol brilla a destiempo» (que abre el trabajo, y lo cierra en una reversión dub) y «Necesito tu amor» y el ska con «Tren de las diez». Pero el abanico se abre bastante más allá de la música jamaiquina y sus derivados, como lo demuestran el aire a balada de «La calandria y el zorzal», el funk soul de la tremenda «Dime si», el spaghetti western «Al salir el sol» (una canción de Rebeka Nogales), el bolero que da nombre al álbum y las cadencias pop de «Ese camino» y «I can not» (del búlgaro Ivo Dimchev).
Todo está cruzado por una estridencia leve, un aire eléctrico, una constante presencia de teclados y sintetizadores. Hasta por momentos el combo pareciera alcanzar un sonido garagero. A saber: bastante menos caribeño, mucho más urbano. La lista de invitados es amplia y variada, incluye a Maxi Prietto, The Du-Rites, Prince Buster Jr, el infaltable Hugo Lobo, Gori y Ernesto Romeo (se luce en «I can not»), entre otros. Claro que Sergio Rotman es partícipe del trabajo. Imposible desapegarlo de cierto sonido reinante en el trabajo.
Después de una década, ahí está otra vez, un disco de canciones nuevas. Mimi Maura abre la boca y, como si de un llamado se tratara, su canto siempre se escucha.