6 de julio de 2022
Thor: Amor y trueno
Director: Taika Waititi
Protagonistas: Chris Hemsworth,
Natalie Portman, Tom Hiddleston
País: Estados Unidos
El reencuentro entre Thor y Jane, quien regresa con el martillo Mjolnir en su poder.
La cuarta película del dios del trueno cuenta nuevamente con la dirección –y actuación en este caso– de Taika Waititi, el realizador neozelandés que sorprendió con la comedia de terror Casa vampiro en 2014, una suerte de extraño Gran Hermano entre chupasangres reconocida en festivales y camino a ser considerada una película de culto. Pero su trayectoria detrás de cámaras tiene un punto mayor con Jo Jo Rabbit, la sátira sobre la Segunda Guerra Mundial donde un niño fanático nazi tenía al mismísimo Adolf Hitler de amigo invisible.
Ese humor corrosivo lo llevó en 2017 a ser considerado por Marvel para revivir la saga de Thor, el superhéroe con menos trasfondo psicológico –entiéndase gracia y tela para cortar para los guionistas– de todo el universo creado por Stan Lee. La cuestión es que Waititi no solo revitaliza la saga sino que le imprime ritmo, color y todo el humor que le faltaba a las dos primeras películas con Thor: Ragnarok. Recordemos que la primera fue dirigida por el especialista en Shakespeare Kenneth Branagh (otro director-actor) y era, en resumidas cuentas, una tragedia épica con efectos especiales. La segunda, Thor: Un mundo oscuro, bajo la dirección de Alan Taylor, tomaba un tono sombrío propio del universo DC y teñía de demasiada solemnidad a un superhéroe cuya arma es un martillo.
En ese tercer y anterior episodio, Waititi no solo transformaba la tragedia de hermanos que se quieren robar el trono en un divertido entretenimiento pop sin ninguna pretensión, sino que además incorporaba a otros personajes del universo Marvel ampliando las posibilidades del multiverso. Allí aparecían Hulk (Mark Ruffalo), Doctor Strange (Benedict Cumberbatch) y Valkiria (Tessa Thompson), además de continuar su hermano Loki (Tom Hiddleston) luego de su propia serie. La aventura terminaba con todos ellos yendo junto con los sobrevivientes de Asgard al planeta Tierra, donde comienza esta nueva aventura denominada Thor: Amor y trueno.
En esta oportunidad, Thor (Chris Hemsworth) se reencuentra con Jane (Natalie Portman), quien regresa junto con el martillo Mjolnir en su poder, ambos (ella y el arma) eliminados del tercer episodio. Juntos deben enfrentar al temible Gorr (Christian Bale), conocido en la galaxia como el carnicero de dioses, con la ayuda de Valquiria (Thompson) y Korg (Waititi detrás y delante de las cámaras). Tampoco faltan los viajes intergalácticos, en esta ocasión con visita al Olimpo reinado por Zeus, interpretado por Russell Crowe.
Thor: Amor y trueno sigue el espectáculo colorido de su antecesora, reafirmando el universo pop con luces, música y otras referencias a la cultura popular y de masas de los años 80, donde el famoso dibujo animado de 1983 He-Man sobrevuela toda la película consciente e inconscientemente: un recurso presente en el film anterior cuando Thor convoca los truenos para obtener la fuerza extrahumana y transformarse en el musculoso guerrero, aquí presente hasta en el póster diseñado a imagen y semejanza del personaje de Grayskull. Este rumbo que adoptó la saga del dios del trueno le sienta mucho mejor al personaje, quien comienza la historia retirado del campo de batalla y con una prominente panza, mientras busca su paz interior. Una tranquilidad que debe interrumpir para ponerse en forma y enfrentar al villano en cuestión. El humor del estilo Guardianes de la galaxia llegó para quedarse en un tipo de relato que apuesta por la aventura divertida e infantil propia de Sábados de Súper Acción, que refresca de este modo las onerosas vueltas de tuerca que acechan al personaje de la mitología nórdica.