30 de mayo de 2016
Mirada. Gleyzer es uno de los principales exponentes del cine militante latinoamericano.
El 27 de mayo de 1976, Raymundo Gleyzer es secuestrado en Buenos Aires por la dictadura militar y llevado al campo de detención El Vesubio, donde es torturado. A 40 años de su desaparición, se realizarán una serie de homenajes que incluyen la edición de Compañero Raymundo, libro escrito por la periodista y cineasta Cynthia Sabat y Juana Sapire (esposa y madre de su hijo Diego), y de cuatro dvd con toda su obra cinematográfica remasterizada, junto con los documentales Raymundo, de Ernesto Ardito y Virna Molina, y Fuego eterno, de Cynthia Sabat.
Considerada una de las voces más innovadoras y comprometidas del movimiento cinematográfico militante latinoamericano, Gleyzer estudió cine en La Plata pero abandonó la carrera para viajar a Brasil a rodar su primer cortometraje, La tierra quema (1964). Después de realizar varios informes para Telenoche, filmó México, la revolución congelada (1971), al que le siguió Swift, surgido del secuestro del cónsul inglés y su canje por comida y mejores condiciones laborales para los trabajadores del frigorífico.
Más tarde dirigió Ni olvido ni perdón (1972), sobre la fuga del penal de Rawson y la Masacre de Trelew. Junto con el Grupo Cine de la Base, que él mismo creó, realizó su película más ambiciosa: Los traidores (1973), una ficción basada en hechos reales que diseccionaba el funcionamiento de la burocracia sindical a través de la transformación de un líder obrero en un sindicalista corrupto. Pero en 1976 fue secuestrado por fuerzas de la dictadura y aún hoy continúa desaparecido. En 2011, el juicio de El Vesubio culminó con la sentencia a sus responsables tras 35 años de impunidad.
«Compañero Raymundo nace cuando Juana viaja desde Nueva York a Buenos Aires para testimoniar por primera vez por la desaparición de Gleyzer. En esa ocasión, la acompañé a dar su testimonio, y estuve con ella en todo el proceso. En esos días surgió su propuesta de escribir un libro que plasme por primera vez su visión de la historia vivida junto a Raymundo y el grupo Cine de la Base», comenta Sabat en diálogo con Acción.
Los homenajes comenzaron el 27 de mayo en el Cine Gaumont, con la proyección de Los traidores, film que conserva la vigencia de hace 43 años. Por otra parte, el 1 de junio, en el Centro Cultural de la Cooperación, se presenta Compañero Raymundo y, además, se proyecta Me matan si no trabajo, y si trabajo me matan (1974), la última película de Gleyzer, que hace foco en la huelga obrera en la fábrica insud.