31 de mayo de 2021

Justo en la gestión de Blutrach como asesor de contenidos, programación artística y producción, el Teatro Nacional Cervantes cumple 100 años. «Como todo cumpleaños importante, lo celebramos festejando», explica Blutrach. «Y eso incluye cuestiones editoriales, simbólicas, arreglos en el espacio. Apenas terminamos de grabar las piezas, nos pusimos con una obra edilicia muy importante y atrasada: cambiamos toda la instalación eléctrica del escenario, que era muy antigua, casi peligrosa. Una puesta en valor muy grande, postergada muchos años. Levantamos el piso, arreglamos el giratorio, quedó un escenario cero kilómetro, como los de los grandes teatros de Europa. Encargamos una obra al dramaturgo Gonzalo Demaría y al director Ciro Zorzoli para que recorra nuestra historia relacionada con los artistas. Se trata de un espectáculo muy divertido, con la idea de girarlo por las provincias y presentarlo en sala y al aire libre a fin de año. Todas y todos los trabajadores del teatro van aportando ideas que vamos sumando al festejo. Las autoridades estamos de paso, pero ellos hacen que el teatro sea lo que es».