16 de diciembre de 2023
El complejo vacacional de Chapadmalal logra conjugar el tiempo libre con los valores del cooperativismo. Impacto en la comunidad local.
Otra forma de vacacionar. La propuesta recreativa de RCT es uno de los principales puntos diferenciales del complejo.
Foto: Juan M. Quintanilla
En diciembre de 1980 se inauguró en Chapadmalal, localidad ubicada 12 kilómetros al sur de Mar del Plata, Residencias Cooperativas de Turismo (RCT). La iniciativa iba más allá de un lugar para pasar las vacaciones: desde sus comienzos, se buscó que fuera, además, un espacio con propuestas educativas y recreativas que transmitan las ideas de solidaridad y ayuda mutua que caracterizan al movimiento cooperativo. Para Juan Torres, presidente de RCT, este rasgo sigue siendo la fortaleza del turismo cooperativo, una forma de vacacionar que con el tiempo logró conjugar la recreación con lo afectivo y lo social. «Desde RCT, como desde todas las cooperativas, aplicamos la filosofía humanista, la solidaridad, la ayuda mutua, el estar cerca de la gente y consustanciar los principios del movimiento cooperativo con el personal que colabora para la gestión», sintetiza Torres.
Junto a la comunidad
La filosofía de trabajo de Residencias se lleva a la práctica no solo puertas adentro, sino también junto con la comunidad, propiciando acciones de integración.
«El arraigo y la interacción es posible a través del cooperativismo y en nuestro caso podemos hacerlo desde lo turístico, ya sea a través de nuestros recreólogos que trabajan con los niños realizando actividades y hablando sobre los principios del movimiento, como cuando hacemos una obra de teatro o presentamos alguna película, eligiendo un contenido», agrega Juan Torres. Como ejemplo, meses atrás, el complejo se llenó de estudiantes de diferentes colegios y participantes de los Juegos Bonaerenses, unos ocho mil en total, que vieron y debatieron el film Argentina 1985.
En comunidad
Chapadmalal es una comunidad en auge que tiene jardín de infantes, primaria y secundaria, parroquia, club de barrio y sociedad de fomento. Con todas las instituciones RCT mantiene un vínculo cercano y de reciprocidad, que se materializa con donaciones, pero también con charlas y encuentros fomentados desde la Secretaría de Educación, que promueve los valores del cooperativismo y el impacto de la economía social.
Estas experiencias compartidas profundizan el objetivo de este tipo de turismo, fundado en la cooperación y la democracia participativa, pero también orientado al cuidado del ambiente, la promoción de la cultura, la generación de trabajo y el acceso al turismo como un derecho y al desarrollo sostenible.
«Las cooperativas necesitan tener recursos bien gestionados porque crean un efecto multiplicador», agrega Torres y ejemplifica: «En RCT estamos terminando la remodelación y ampliación de nuestros departamentos, con lo que hemos generado mucho trabajo en la comunidad».
Así como el sector turístico es una fuente relevante de generación de divisas para economías en desarrollo en todo el mundo, el turismo cooperativo genera ingresos directos e indirectos en la comunidad local y, a la vez, suma lo que Torres considera un «plus»: la identidad. «No cabe duda de que las cooperativas que tienen el espíritu del cooperativismo transformador juegan un rol de esclarecimiento a los huéspedes y socios de las cooperativas» y eso, en RCT, se ve plasmado en las charlas con personalidades de la cultura que a lo largo del año proponen un diálogo y una forma de pensar con otros. Así, figuras como Víctor Hugo Morales, Juan Carlos Junio, Daniel Filmus, Eugenio Zaffaroni, Felipe Pigna y Atilio Boron ya se dieron cita en el auditorio del complejo turístico. Para el próximo verano están comprometidos los periodistas Fernando Borroni y Cynthia García y personalidades como Adolfo Pérez Esquivel y María Laura Garrigós, de Justicia Legítima, todas actividades libres y gratuitas.
En movimiento. La entidad se caracteriza por tener un gran protagonismo en la comunidad.
Foto: Juan M. Quintanilla
Calidad y respeto
RCT es el reflejo de la consolidación del turismo cooperativo en el país, y también una muestra de que es posible conjugar oferta de calidad, innovación y confort.
En el último Congreso de la Asociación de Turismo de México, que se realizó en noviembre, el complejo fue nominado entre los mejores establecimientos en dos categorías: innovación y responsabilidad social. «Es un orgullo y una construcción colectiva llegar a esto», señala Torres y cuenta que «muchos se sorprendieron con todo lo que nosotros podemos hacer, diferenciándonos de un simple servicio hotelero». Además, la Secretaría de Turismo de la provincia de Buenos Aires le otorgó la categoría cinco estrellas.
Para el dirigente, lo más importante es tener «una mirada más amplificadora del mundo que nos rodea» y eso involucra no solo a los huéspedes –este año adecuaron el complejo para personas con discapacidad y compraron para el verano sillas anfibias para poder entrar al mar– sino también a los trabajadores.
RCT emplea a 180 personas en forma directa, algunas de ellas en forma permanente y otras estacionales, a medida que la ocupación crece. «Vamos a buscar al personal con una combi y lo llevamos nuevamente a sus casas, y también hacen aquí todas las comidas, porque para nosotros es fundamental tener a la gente contenta y conforme», cuenta Torres y agrega que, al finalizar la temporada en el mes de abril, se hace una gran fiesta en los salones, donde todos se llevan un premio y un reconocimiento por todo el trabajo realizado.