6 de julio de 2024

Durante el mes de mayo, el Indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC) que confecciona el Indec registró una baja de 32,6 por ciento respecto a igual mes de 2023. Así, el acumulado de los cinco primeros meses arroja una caída del 32,2 por ciento interanual.
Si bien en la comparación mes a mes, tanto en mayo respecto de abril como de junio frente a mayo, hay mejoras, el nivel de actividad es tan bajo que la dirigencia empresarial del sector ya presentó públicamente quejas al Gobierno. 
Muestra de ello fue lo señalado la semana pasada durante el evento anual de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), oportunidad en la cual Gustavo Weiss, titular de la entidad, detalló que cuando comenzó el gobierno de Milei había 3.500 obras en marcha financiadas por el sector público, las cuales se paralizaron para anteponer el equilibrio fiscal, a excepción de alguna como lo es la reversión del Gasoducto Norte y, ahora, la Cárcel de Coronda. El freno de las obras determina, según Weiss, una deuda del Estado nacional con las empresas constructoras del orden de los 400 mil millones de pesos, indicó Página12.
Entre los principales factores de la caída de la actividad, se hallan el parate en la obra pública junto con la renovada inestabilidad cambiaria.