22 de septiembre de 2025

La papelera Celulosa Argentina se vendió por el valor simbólico de US$1, al empresario Esteban Nofal. La empresa atraviesa un concurso de acreedores para evitar la quiebra, y tiene que afrontar una deuda de US$128 millones. Nofal es dueño de la financiera CIMA Investments S.A. e hijo de Luis Benjamín Nofal, cofundador de Torneos y Competencias. La quiebra fue solicitada por la firma Tecmaco, por una deuda de $17 millones por cheques rechazados. Nofal compró 452,6 millones de acciones clase B, lo que equivale al 45,5% del capital social de la empresa, que cotiza en Bolsa. Así, la compañía deja de estar en manos del fondo Tapebicuá, integrado por José Urtubey, Douglas Albrecht y Juan Collado, entre otros accionistas. Sus últimos resultados financieros, al 31 de mayo, registraron una pérdida semestral de $172.634 millones, en contraste con la ganancia de $37.831 millones del mismo periodo del año anterior. Mientras que, desde fines de julio, Celulosa tiene sus plantas de Capitán Bermúdez (Santa Fe) y Zárate (Buenos Aires) paralizadas, debido al «marcado deterioro del capital de trabajo», argumentó la firma.