26 de diciembre de 2025
Al menos 250 personas han tenido que abandonar sus hogares en la región del Catatumbo, en Colombia, en las últimas 24 horas y cerca de 6.000 más se encuentran en riesgo de confinamiento y desplazamiento forzado debido a los recientes enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una disidencia de las FARC. El Consejo Noruego para Refugiados (NRC, por sus siglas en inglés) alertó sobre una agudización de la crisis humanitaria en la zona, derivada de la disputa territorial y del control de economías ilícitas entre estos grupos armados. En un comunicado emitido esta semana, el NRC precisó que «cerca de 250 personas, obligadas a huir de sus hogares, han llegado a las ciudades de Cúcuta y Ocaña, en el nororiente de Colombia», en las últimas horas. La organización humanitaria subrayó que dichos desplazamientos responden directamente a la escalada de violencia iniciada a mediados de enero, cuando el ELN declaró una ofensiva contra el Frente 33 de las disidencias de las FARC. La región del Catatumbo se ha convertido en un epicentro de confrontaciones armadas que han dejado cerca de un centenar de muertos y han forzado a miles de campesinos a abandonar sus tierras, muchas veces sin posibilidad de retorno debido a la persistencia de los combates. El NRC advirtió que, de no garantizarse la protección de la población civil, «en los próximos días el número de personas podría incrementarse».
