18 de junio de 2024
En los primeros cinco meses del año, el consumo promedio de carne vacuna por habitante en el país fue de 44 kilos anuales, un 15,9% por debajo de lo registrado para el mismo período de 2023. Por peso, la caída de la ingesta fue de 8,3 kilos. Exceptuando los primeros cinco meses de 2020, se trata del volumen más bajo de los últimos 30 años. La información fue proporcionada por un relevamiento de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra). El informe puntualiza que la brutal caída del consumo ocurrió pese a una desaceleración de precios. Los valores de la carne vacuna subieron en mayo último 2,4%. Además, señala que, al comparar los precios de mayo último con los de igual mes de 2023, el alza fue de 283,9%. El máximo incremento correspondió a la carne picada común, cuyo valor subió 307,8% en los últimos doce meses; y el mínimo, al asado, con un alza de 259,7% interanual. El presidente de la Ciccra, Miguel Schiariti, estimó que la desaceleración de precios registrada «en el mostrador de las carnicerías» y la fuerte caída de ventas respondieron a «la significativa contracción que registró el poder adquisitivo de las familias en el último año».