2 de julio de 2023
Una multitud se congregó este sábado ante la funeraria en una mezquita de la localidad del noroeste de París y luego se dirigió al cementerio de Mont-Valérien para el entierro de Nahel, el adolescente de 17 años al que un policía le disparó a quemarropa durante un control de tránsito.
“Que descanse en paz, que se haga justicia. He venido para apoyar a la madre, ella no tenía a nadie más que a él”, declaró una asistente que prefirió mantenerse en el anonimato, según replicó la agencia de noticias francesa AFP.
Mientras tanto, la Policía francesa arrestó a más de 1.300 personas en la cuarta jornada de protestas y disturbios tras el caso de “gatillo fácil” por el que murió el adolescente, que fue inhumado en medio de la más estricta intimidad a pedido de su familia, para no exacerbar todavía más la tensión, según detalla Télam.
El Ministerio del Interior, Gérald Darmanin, informó que la violencia fue de “una intensidad mucho menor” que en las noches anteriores, pese a que hubo récord de detenidos desde el inicio de la revuelta el martes pasado, luego de las 875 personas detenidas en la noche del jueves, y 79 policías y gendarmes heridos.