23 de noviembre de 2025
La histórica fábrica de ollas Essen, que funciona desde hace 45 años en la ciudad de Venado Tuerto, Santa Fe, despidió a 30 operarios en los últimos días y la comunidad se encuentra preocupada por las consecuencias.
De una fundición en su casa la familia Yasci, pasó a crear una fábrica de 20.000 metros cuadrados que hoy es dirigida por la tercera generación. Las cacerolas de aluminio fundido lanzadas en la década del ’80 revolucionaron los hogares argentinos, describió el portal BAEnegocios.
Poco a poco sumó vendedores y hoy tiene 20.000 revendedores y revendedoras en Argentina, Paraguay, Bolivia, Perú y México, donde llegó en junio de este año. Colombia está en la mira, podría ser el próximo país. El producto estrella es la multifunción Flip, ya se vendieron 3 millones de unidades. Este año lanzaron además la línea Fusión de acero inoxidable con alma de aluminio. Por todo esto, es incomprensible la decisión empresaria de desvincular a una treintena de personas.
Según trascendió, en octubre hicieron un ajuste en la planta. Hubo 30 despidos, 20 fueron trabajadores efectivos de Essen y 10 eran contratados a los que no se les renovó el contrato. Para los vecinos de Venado Tuerto fue una sorpresa. Incluso muchos sintieron temor de que avance la relación con oriente y los productos se importen. Los rumores indicaban que se iban a empezar a fabricar más piezas en China y esto obligaría a prescindir de trabajadores.
“Para tratar de calmar los ánimos, los propietarios reunieron a los trabajadores y les dijeron que se queden tranquilos que la planta iba a seguir. Les aclararon que ese ajuste fue necesario pero que irán viendo cómo sigue todo. Incluso se comprometieron a no despedir más gente por este año”, señalaron desde la Unión Obrera Metalúrgica de la ciudad santafecina.
