18 de junio de 2025
Estados Unidos se opuso a una declaración firme sobre Ucrania que buscaba condenar a Rusia durante la cumbre del G7, que terminó ayer en Canadá, trastocada por la partida anticipada del presidente Donald Trump. El conflicto en Ucrania era uno de los principales ejes de la cita anual del club de grandes democracias industrializadas (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Reino Unido y Japón), esta vez en Kananaskis, en las Montañas Rocosas canadienses. «No habrá declaración sobre Ucrania porque los estadunidenses querían diluirla», explicó un funcionario canadiense bajo condición de anonimato, en el último día de la reunión. Los otros seis miembros del G7 acordaron un «lenguaje fuerte», pero una declaración conjunta habría requerido el acuerdo de Estados Unidos, que argumentó que quería preservar su capacidad de negociación, agregó esta fuente. El presidente ucranio, Volodimir Zelenski, fue invitado a la cumbre y se reunió este martes con los otros líderes del G7, unas horas después de un ataque que dejó al menos 14 muertos en Kiev.