6 de agosto de 2024
Un juez en Estados Unidos señaló a Google como culpable de prácticas contrarias a la competencia, en particular mediante contratos que imponen su motor de búsqueda en aparatos electrónicos. La empresa de Mountain View fue acusada de gastar hasta U$S 26.000 millones, sólo el año pasado, para asegurarse de que su buscador fuera utilizado por defecto en algunos teléfonos inteligentes y navegadores de internet. La mayor parte de esa suma tuvo como destino a Apple. «Los acuerdos de distribución firmados por Google (…) impiden a sus rivales competir», justificó el magistrado en su decisión. El departamento de Justicia considera que esta práctica viola el derecho a la competencia y que los contratos son ilegales, ya que Google es dominante en el mercado. De acuerdo con documentos a los que AFP tuvo acceso, el juez estimó que «luego de estudiar atentamente testimonios y pruebas, la corte llegó a esta conclusión: Google es un monopolio y actúa de forma de mantenerlo».