27 de junio de 2022
Entrevistados por el diario Página/12, Radio 10 y una periodista venezolana, Víctor Pérez, gerente de Operaciones de Emtrasur – la propietaria del Boeing 747 retenido en Ezeiza desde principios de mes-; el gerente de Finanzas de la empresa, Mario Arriaga, y el técnico inspector José García, aseguraron que los cinco ciudadanos iraníes que forman parte de la tripulación son instructores que cumplen tareas de «pilotos de mando, capitán, primer oficial e ingenieros de vuelo». Igualmente, señalaron que no tienen ninguna relación «con la Guardia Revolucionaria de Irán», según las acusaciones que investiga el juez Federico Villena, y afirmaron que el Estado venezolano compró ese avión a una empresa iraní ya que el bloqueo de EEUU a Venezuela impide acceder a aeronaves provenientes de otros países. La presencia de iraníes, indicaron, es fruto de un convenio «para que estén adiestrándonos durante seis meses». Luego agregaron que «no hay que ser un experto en aeronáutica» para entender «se requiere de un amplio número de tripulantes y de adiestramiento» para manejar un avión de semejante porte y destacaron que Venezuela «no tiene pilotos instructores 747-300».
