11 de agosto de 2023
Varios expertos destacaron la importancia científica de la misión rusa Luna-25, que despegó la mañana de este viernes desde el cosmódromo Vostochni, en el Lejano Oriente de Rusia, con destino al polo sur de la Luna. En caso de que la misión tenga éxito, Rusia se convertirá en el primer país en aterrizar una sonda robótica en el Ártico lunar. Se espera que el módulo de aterrizaje opere en la superficie lunar, estudiando el regolito de la superficie y el polvo y las partículas exosféricas durante un año. Además, una de las tareas principales es comprobar la presencia de agua congelada que podría sustentar la vida en la Luna. «Creo que, a largo plazo, la Luna será una plataforma de lanzamiento para la exploración del espacio profundo, de planetas lejanos» declaró el jefe de Roscosmos, Yuri Borisov, añadiendo que, si se encuentra agua, «se abrirán perspectivas muy serias de uso industrial» del satélite natural.