4 de diciembre de 2025
La pobreza en Argentina se ubicó en 36,3% al cierre del tercer trimestre, mientras que la indigencia afectó al 6,8%, según el último informe del Observatorio de la Deuda Social (ODSA) que elabora la Universidad Católica Argentina (UCA) en base a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Si bien se observa una baja respecto al tercer trimestre de 2024 (45,6% y 11,2%, respectivamente, su valor más alto desde 2005), la estabilización todavía no se traduce en mejoras reales en el bienestar. El documento, «Estrés y bienestar en una Argentina en transición» de la UCA, revela que Argentina transitó un proceso de «ajuste más normalización», pero no un proceso de desarrollo. Eso se traduce en una paradoja: bajó la inflación, se ordenaron precios relativos, se redujo la nominalidad y el Estado recuperó capacidad fiscal, pero la cotidianeidad de millones de hogares sigue marcada por ingresos insuficientes, menor calidad laboral, inseguridad alimentaria persistente y un nivel de malestar subjetivo que no encuentra piso. Desde la UCA se advierte que la caída que se ve en los números oficiales está inflada por cambios en la captación de ingresos de la EPH. Sin esa corrección, la baja sería considerablemente menor.
