11 de septiembre de 2014
«Esta decisión es significativa como el precedente de un caso causado por el accidente de la central nuclear. El veredicto influirá en gran medida en futuras demandas», expresó el abogado de la familia de Hamako Watanabe tras la condena a Tokyo Electric Power (TEPCO). La compañía que operaba la central de Fukushima fue declarada culpable del suicidio de la granjera de 58 años y deberá pagar una indemnización de 49 millones de yenes. El desastre atómico produjo que Watanabe perdiera su negocio y no pudiera cancelar las deudas hipotecarias que había contraído. Poco después, ella y sus familiares fueron obligados a abandonar su hogar cuando se amplió la zona de peligro radioactivo. «El tribunal tomó una decisión significativa que es consistente con nuestros sentimientos. El sufrimiento de la familia y el dolor son resarcidos, al volver a casa me gustaría decirle al retrato de Hamako que puede descansar en paz», dijo el marido de la víctima.