21 de octubre de 2021

En su afán por impulsar la apertura económica del país, Luis Lacalle Pou anunció que el Gobierno uruguayo comenzará a negociar tratados de libre comercio con distintas naciones, por fuera de la estructura del Mercosur. La decisión no solo podría significar un duro golpe para la industria charrúa, sino que además abrió la puerta a un conflicto diplomático con sus socios regionales.
Ocurre que, al iniciar negociaciones extrazona y por su cuenta, Lacalle Pou olvidó un detalle: que para hacerlo precisa el consentimiento de todos los países miembro del Mercosur, algo que no ocurrió. Por eso se generó malestar entre los socios que integran el bloque regional y por eso, también, afloraron nuevas tensiones entre el Gobierno uruguayo y el argentino.
Cabe recordar que, en marzo de este año, el presidente Lacalle Pou dijo que el Mercosur era un «lastre» y que constituía un «corset» para los países miembro. En ese momento, el presidente mandatario Alberto Fernández le contestó con dureza: «Si somos un lastre, que tomen otro barco». El mandatario argentino recordó, además, que el Tratado de Asunción –que creó el bloque en 1991– «preserva el principio de la política comercial común», lo que «implica que las negociaciones deben iniciarse y concluirse de manera conjunta».