12 de noviembre de 2025
De cara a las presidenciales de Chile, crece la figura de Johannes Kaiser, un acérrimo defensor de la dictadura militar. Libre mercado y mano dura, sus ejes de campaña. Discursos de odio y redes sociales.

Rumbo a las elecciones. Uno de los fuertes spots del candidato del partido libertario.
Las elecciones presidenciales en Chile, a celebrarse el 16 de noviembre, podrían tener un protagonista que no estaba en los papeles de nadie. Cuando desde el lado de la derecha todo parecía circunscripto a la pulseada entre dos candidatos de larga experiencia, entró en escena Johannes Kaiser, una suerte de outsider defensor acérrimo del dictador Augusto Pinochet, y fundador del Partido Nacional Libertario (PNL), que se suma a la disputa por la conducción del país para el período 2026-2030.
Kaiser, de 49 años, integra el triángulo formado también por los candidatos José Antonio Kast y Evelyn Matthei, de donde saldrá –según predicen los sondeos– el que eventualmente competirá en segunda vuelta contra Jeanette Jara, la dirigente comunista que se presenta por el oficialismo.
Johannes Maximilian Kaiser Barents-von Hohenhagen nació en Santiago de Chile, el 5 de enero de 1976 en el seno del matrimonio entre Juan Cristian Kaiser Wagner y Rosmarie Barents-von Hohenhagen. Es el mayor de seis hermanos y con dos de ellos comparte su vocación política. Está casado con Ivette Avaria Vera en 2022, con quien tiene una hija.
Realizó sus estudios primarios en el Colegio Alemán y la secundaria en la Escuela Militar del Libertador Bernardo O’Higgins. Después estudió Derecho en la Universidad Finis Terrae (1995), carrera que no concluyó, como tampoco sus estudios de Historia, Derecho y Ciencia Política realizados en la austríaca Universidad de Innsbruck, donde estuvo matriculado durante 14 años.
En ese país europeo desempeñó distintos trabajos temporales, entre ellos mozo, obrero de la construcción, vendedor, encargado de restaurante y periodista deportivo freelance para el club de fútbol Wacker Innsbruck.
En su página web se autodescribe como un hombre de ideas paleolibertarias, ubicado en la derecha conservadora en lo social, liberal en lo económico y defensor de las libertades y derechos individuales del ser humano, desde el momento de la concepción.
Kaiser propicia además la libre tenencia de armas, es taxativo en su discurso antimigratorio y feroz detractor de la Agenda 2030 de la ONU, un conjunto de posturas que junto a la pena de muerte han logrado canalizar en Chile la frustración generalizada frente a la delincuencia, la inmigración y la llamada «la política de siempre».
En 2019 publicó un documental dirigido y financiado por él mismo, sobre Miguel Krassnoff, un agente de la siniestra Central Nacional de Informaciones (CNI) que actualmente cumple una condena de más de 1.000 años de cárcel por secuestros, violaciones, torturas y asesinatos de opositores a la dictadura. En el film de nombre Los cosacos y Miguel Krassnoff. La historia no contada, Kaiser exige la «urgente y pronta» liberación del condenado.
Construyó su «marca personal» a partir de una particular radicalidad frente a una serie de sucesos que marcaron la historia reciente del país vecino, entre ellos el estallido social de 2019 que buscó derrumbar la herencia institucional de la dictadura (1973-1990) y reconfigurar la política chilena con un nuevo modelo más progresista.
Esa iniciativa reformista fracasó y Kaiser fue uno de los pocos políticos que desde el principio se opuso sistemáticamente a todo el proceso. Su canal de Youtube «El Nacional Libertario» condenó la totalidad de las propuestas de cambio que inspiraron el estallido, lo que permitió crecer exponencialmente y transformar esa popularidad en un escaño legislativo en el año 2021.
Allí integra las comisiones permanentes de Derechos Humanos y Pueblos Originarios; Defensa Nacional y Gobierno Interior y Regionalización.
También cumple funciones en la Comisión Especial Investigadora sobre irregularidades y el posible tráfico de influencias en la Policía de Investigaciones (PDI) una rama de la policía civil que desarrolla labores en materia de investigación criminalística.
Es hermano de Axel Kaiser, el intelectual libertario conocido en Argentina a partir de su teoría de que los socialistas son víctimas de «parásitos mentales», y también por presidir la del think tank radical Fundación para el Progreso, por lo que se vincula al caso $Libra, ya que hasta febrero de 2025 figuraba como vicepresidente de la Fundación Faro, la entidad asociada al criptoescándalo.
El resto del clan familiar comparte la visión política de Johannes pero se dedican a los negocios y a las empresas heredadas de la tribu familiar.

En ascenso. Kaiser en un acto con sus seguidores, el pasado 30 de septiembre.
Foto: redes sociales
Polémica y crecimiento
En línea con el estilo disruptivo y provocador de este tipo de figuras contemporáneas, el ahora diputado creció al amparo de las polémicas y los debates picantes en los medios y las redes.
Entre las más controvertidas sobresale un momento televisivo en el que puso en duda «la conveniencia del derecho a voto femenino», su propuesta de otorgar medallas a los violadores de las «mujeres feas» y declaraciones en su canal de Youtube acerca de que «en Chile se fusiló poco» durante la dictadura de Pinochet o que los asesinados en Pisagua –un centro clandestino de la dictadura, ubicado en el norte del país– «estaban bien fusilados».
La Justicia le ordenó borrar el video por incitación al odio y a la violencia, a partir de la denuncia de la hermana de uno de los desaparecidos en el caso.
La campaña presidencial en curso no atenuó su estilo y en un programa del primetime televisivo aseguró que «apoyaría un nuevo golpe de Estado» como el del 11 de septiembre de 1973, si las condiciones de ese mismo año se repitieran hoy, y que, en caso de llegar al poder, proscribiría al Partido Comunista de Chile por «el enorme daño que le hizo a la democracia chilena».
En marzo de este año decidió correr solo y se negó a participar de una primaria de la derecha argumentando que el resto de los candidatos de ese espacio «no son sólidos políticamente».
La polarización de la campaña durante las últimas semanas y el estilo belicoso de Kaiser movieron el tablero a su favor y el candidato empezó a mostrar un perfil mucho más competitivo que lo ubica en el tercer lugar y desplazando a Matthei, según los institutos demoscópicos Cadem y Pulso Ciudadano.
Las elecciones en las que se medirán un total de ocho candidatos augura un resultado reñido. Chile utiliza el sistema de balotaje si ningún candidato obtiene la mayoría absoluta (más del 50% de los votos) en la primera vuelta, en cuyo caso se celebra una segunda votación entre los dos candidatos más votados programada para el 14 de diciembre de 2025.
