Opinión

Pedro Brieger

Periodista

El enemigo es China

Tiempo de lectura: ...

Para comprender la política exterior de los Estados Unidos siempre es pertinente recordar la frase de la ex secretaria de Estado, Madeleine Albright: «EE.UU. actúa multilateralmente cuando puede y unilateralmente cuando debe».
La reciente creación de la alianza militar AUKUS responde a este razonamiento porque ya hace varios años que Washington definió a la República Popular de China como su principal enemigo a largo plazo.
Ahora, dejando de lado pactos previos, Estados Unidos impulsa AUKUS, una nueva alianza militar con Australia y el Reino Unido, utilizando las iniciales de cada país en inglés. En el juego entre potencias, desde la Casa Blanca le hicieron saber a Francia el lugar que tienen en el concierto internacional al birlarle el negocio de más de 60.000 millones de dólares por la venta de submarinos a Australia, lo que enfureció al presidente Emanuel Macron. Amén del negocio, fue decirle a la otrora gran potencia colonizadora que puede estar en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y tener presencia política, económica y militar en América, África y Asia, pero representa el pasado.
El objetivo es claro: cercar a China. La historia ha demostrado una y otra vez que toda potencia hegemónica que se enfrenta al crecimiento desafiante de otra tiene que hacer gala de todo su poderío y, si enfrenta dificultades, mostrar su fortaleza económica e imponer su presencia militar ofensiva. Lo paradójico, en este caso, es que China se ha convertido en una potencia económica que crece más que EE.UU., entre otros motivos, porque no tiene un aparato militar sobredimensionado. Su política es defensiva.
A diferencia de la mentalidad estadounidense construida en apenas doscientos años, la filosofía política china está basada en una cultura milenaria donde el tiempo juega un papel fundamental. En la Casa Blanca no parecen percibirlo.

SMIALOWSKI/AFP/DACHARY

Estás leyendo:

Opinión | Pedro Brieger

El enemigo es China