30 de junio de 2024
Obras frenadas. Centrales hidroeléctricas Cepernik y Kirchner: su construcción detenida por escaso diálogo con China.
Foto: @patagoniarep
Muchos contrapuntos se pueden establecer entre Claudia Sheinbaum, la presidenta electa de México, y Javier Milei. Uno de ellos podría ser el grado de predisposición para trabajar con líderes que consideran en sus antípodas. Mientras la líder de izquierda manifestó: «Ya sea Trump o Biden el próximo presidente de los EE.UU., nos vamos a acercar y vamos a trabajar en lo que nosotros pensamos que es la solución integral del problema general de la migración, que es la cooperación para el desarrollo». Conocidas son las negativas del libertario para avanzar en políticas conjuntas con el Brasil de Lula, con España o con China. Estas tensiones no son inocuas para Argentina.
La escalada diplomática con Brasil fue un obstáculo que demoró la resolución de la crisis del GNC, que derivó en cortes de gas a industrias en mayo. El poco dialogo con China frenó la construcción de las centrales hidroeléctricas Cepernik y Kirchner. Y hasta el cruce de declaraciones con Sánchez derivaron en que España, el segundo país de importancia del que Argentina recibe Inversión Extranjera Directa, retire su embajador.
Para peor, el Gobierno argentino no está obteniendo resultados alentadores para diversificar las fuentes de ingresos de divisas que podrían evitar tensiones cambiarias. En los primeros cuatro meses del año, por préstamos de organismos internacionales y acuerdos bilaterales, sin incluir al FMI, se alcanzaron egresos netos por USD 4.055 millones, cuando en igual cantidad de meses de 2023 el saldo era equilibrado. Incluso tampoco se consiguió que el FMI envíe fondos adicionales a los estipulados en el acuerdo de 2022, utilizados para refinanciar el préstamo recibido por el Gobierno de Macri en 2018.
Con este panorama, no solo se aleja la idea original del Gobierno de liberar restricciones cambiarias, sino que empiezan a surgir dudas sobre cómo se afrontarán los compromisos de deuda en moneda extranjera por USD 17.400 millones que vencen hasta fines de 2025. Sin duda, las anteojeras ideológicas son un obstáculo adicional que dificulta aún más el tránsito de un modelo que, sabemos, resulta inviable.
