Economía

Góndolas recargadas

Tiempo de lectura: ...

Los súper e hipermercados, actores clave en la formación de precios, siguen ganando terreno en la venta de alimentos y de artículos básicos en detrimento de los comercios de menor tamaño. Las principales firmas ocupan 77.000 trabajadores.


Presencia. Las nueve cadenas más grandes aumentaron sus sucursales entre 2010 y 2016. (Télam)
 

Pese a la fuerte caída del consumo popular, los súper e hipermercados atravesaron el año con un recorte apenas marginal de sus ganancias y sin perder su posición hegemónica. Al contrario, el sector continúa ganando terreno en desmedro de los pequeños y medianos comercios, mientras distintos análisis vaticinan que el rubro será –vía mayor concentración de ventas– uno de los grandes ganadores de los próximos años.
La calificadora de riesgos local Evaluadora Latinoamericana sostiene esa previsión, al precisar que las cadenas locales concentran hoy un 30% del expendio total de alimentos, frente a cerca de 50% en Brasil, México y Chile, y a niveles de 70% a 80% en Estados Unidos y Europa.
La Federación de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys), advirtió en ese marco sobre el creciente peso del supermercadismo por su capacidad de conectar la industria con el consumo, último eslabón de la cadena, y por su potencialidad para generar empleo, pero particularmente, por su rol en la formación de precios.
En forma simultánea, el poder de negociación con los proveedores (unos 4.500 para 20.000 productos, según se estima) aumenta con el proceso de concentración. «A través del enorme poder de compra –constata Evaluadora– se exige una buena relación precio/calidad, provisión regular y una salida de productos que justifique su espacio en góndola».

 

Tendencias
Las tendencias de concentración oligopólica en distintos mercados se observan también en el supermercadismo, «con similares lógicas centradas en la maximización de ganancias, el desplazamiento o absorción de la competencia y los aumentos sistemáticos de precios», advierte un reciente relevamiento de Faecys.
Lo cierto es que las empresas del ramo controlan cerca del 40% de la comercialización del total de bienes y servicios de consumo básico del país. Las estrategias de expansión de la actividad incluyen el desarrollo horizontal, mediante la apertura de bocas y la diversificación en las modalidades de venta. Se observa en este sentido el crecimiento de locales de cercanía, a expensas de un mercado tradicionalmente ocupado por los autoservicios unibocas, como el comercio de barrio tradicional caracterizado por una conexión social fuerte con la comunidad de inserción, o los mercados de origen asiático.
Las grandes empresas optan por multiplicar las bocas de expendio de superficies comerciales en torno a los 80 y 120 m², como es el caso del formato Express para Carrefour; Market para Dia; Vea para Cencosud; Changomas para Walmart; y Minimercado para Coto. Suman además ventajas como: financiación, tarjetas de descuentos, pago de servicios y envío a domicilio, entre otras.
Al mismo tiempo se incorporan como modalidad de expansión horizontal nuevas formas de comercialización, como son la venta telefónica y por Internet.
Por otro lado, la concentración vertical remite a la incursión de los súper e hipermercados en ámbitos de acopio como el mayorismo y la producción de bienes, que luego venden en sus propias cadenas como marcas propias, obtenidas a través de la asociación y/o compra de empresas productoras de bienes.

 

Radiografía
Si bien se estiman en 3.100 el total de bocas de expendio de los supermercados en todo el país (el doble que a comienzos de 2008), las principales 18 cadenas concentran tres de cada cuatro (2.400). Y dentro de este último grupo, más de 1.800 pertenecen a las cinco primeras (la española Dia, la francesa Carrefour, la chilena Cencosud –Jumbo, Disco y Vea–, la patagónica La Anónima y la mendocina Átomo).  
Las nueve cadenas más grandes en número de bocas (las nombradas, más Coto, la bahiense Cooperativa Obrera, la estadounidense WalMart y la marplatense Toledo), mostraron crecimientos de 56% promedio entre 2010 y 2016. La que más avanzó fue Carrefour, que prácticamente triplicó su presencia: pasó de tener 200 bocas en 2010 a 590 en la actualidad. La expansión obedeció inicialmente a la adquisición de la cadena Eki, y luego a la apuesta por el formato de proximidad que denominan «Carrefour Express».
Cencosud creció solo 2,5% en número de bocas en lo que va del decenio, al concentrarse en la reconversión de sus bocas marca Disco, en su versión Vea para captar un mercado más amplio, y en sus otros negocios en hogar y construcción (con Easy y Blaisten) y en shopping centers (como Plaza Oeste, Palmas del Pilar, Portal Lomas y Portal Rosario, entre otros).
Otras cadenas que tuvieron un crecimiento importante desde 2010 fueron: WalMart con el 78,7%; Toledo, 59,3%; Dia, 51,8%; La Anónima, 42%; y la Cooperativa Obrera con 36,1%. No obstante, si se considera como referencia el período 2014-2016, las cadenas que más crecieron fueron: la santafesina Dar (décima en el ranking nacional), que aumentó su número de bocas en un 68%, y Átomo, un 30,7%.
Estudios privados confían en que una baja en la inflación y un leve repunte del consumo en los próximos años mejorará la rentabilidad del sector. Esas ganancias en alza se sustentarán además con nuevos desplazamientos de comercios minoristas.

 

Estás leyendo:

Economía

Góndolas recargadas