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Daniel Vilá

La alianza opositora afronta disputas de liderazgo en los distritos más importantes, mientras el Frente de Todos logró unificar listas con pocas excepciones.

Buenos Aires. Manes desafía a Santilli y Rodríguez Larreta desde el radicalismo.

(NA)

La irrupción de Facundo Manes en las PASO de Juntos por el Cambio de la provincia de Buenos Aires, los errores conceptuales cometidos por los candidatos de Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad y los excesos verbales que amenazan con dejar heridas están complicando la campaña opositora en esos distritos decisivos.
Está claro que la estrategia del neurocientífico para competir mano a mano con la lista que encabeza Diego Santilli se basa en aprovechar lo que en otras circunstancias podrían ser defectos: no tener antecedentes políticos evaluables y no haber ocupado cargos públicos. Cuenta además a su favor con la aún poderosa estructura radical del interior provincial y con la escasa empatía de Santilli con el electorado bonaerense, debido a su condición de porteño trasplantado. También con importantes apoyaturas económicas. Una nota que firma el periodista Diego Genoud en eldiarioar.com señala que, entre los sponsors históricos de la Fundación Ineco, que preside Manes, figuran desde Pan American Energy, de la familia Bulgheroni; hasta Aeropuertos Argentina 2000, de Eduardo Eurnekian; bancos; laboratorios como Roemmers, Elea-Phoenix, Insud, Richmond, Pfizer o Temis Lostaló; y empresarios como Martín Cabrales.
En la primera línea de sus detractores internos está Elisa Carrió, quien amenazó con llevarlo a la Justicia luego de que Manes afirmara que le había ofrecido la candidatura a la vicepresidencia de la Nación para las elecciones de 2015, en nombre de la Coalición Cívica, hecho que ella negó de manera terminante. Para enfatizar esa desmentida, Carrió envió a su lugarteniente, Héctor «Toty» Flores. a reafirmarla ante escribano público. Si bien la polémica diputada comunicó que «no volverá a referirse públicamente al tema», no son pocos los que esperan que a la brevedad se produzca otra de sus intempestivas reacciones. Por su parte, Manes ratificó su afirmación con una breve y contundente frase: «Yo no miento».
En cuanto a Santilli, que lidera la lista auspiciada por Rodríguez Larreta y Carrió, cuenta con una base sólida que –teóricamente– debería garantizarle la victoria, junto con su estrecha alianza con los intendentes del conglomerado opositor que gobiernan en el Conurbano. El jefe de Gobierno porteño se juega sus aspiraciones presidenciales en esta coyuntura, ya que un mal resultado en la provincia de Buenos Aires o en su bastión de la Ciudad Autónoma lo dejaría fuera de carrera. Todo indica que conservará su primacía pero por márgenes menores a los de 2019.
Un factor que podría determinar este retroceso, además de la atractiva candidatura de Leandro Santoro por el Frente de Todos, es la inserción en las listas –impuesta por Macri y Bullrich– de candidatos negacionistas como Sabrina Ajmechet y el tucumano exsenador bussista PabloWalter, a lo que se suma la posibilidad de que la boleta de Ricardo López Murphy le rebane una porción sustancial de los votantes de la derecha y el desgaste de María Eugenia Vidal, afectada por la forzada mudanza al distrito capitalino y su insistencia en procurar transmitir una imagen angelical que ya no se corresponde con los nuevos tiempos. Según encuestas confiables la exgobernadora bonaerense habría perdido siete puntos en pocas semanas.
La tercera lista que participará de las PASO de JxC en la CABA tiene como primer candidato a diputado nacional al exsecretario de Salud de Mauricio Macri, Adolfo Rubinstein, y está integrada por radicales disconformes con la escasa participación otorgada a sus correligionarios en las decisiones de la alianza opositora, pero tiene un carácter meramente testimonial.
En el resto del país los posicionamientos son diversos. En Córdoba, por caso, el radical Mario Negri lidera la lista oficial que tiene el apoyo de la mayoría de los radicales, Macri y Carrió, pero también el del gobernador jujeño Gerardo Morales, que en Buenos Aires apuesta por Manes. La opción opositora, encabezada por Luis Juez y el dirigente de la UCR local, Rodrigo de Loredo, es patrocinada por Patricia Bullrich y Martín Lousteau. En Tucumán, Morales y Carrió se aunaron para promover la boleta de José Cano, mientras Larreta y Bullrich apuestan a la del intendente Germán Alfaro. El colmo de la dispersión se da en Misiones donde competirán cinco listas de Juntos por el Cambio: dos radicales, dos del PRO y la del menemista Pedro Puerta, promovida por Miguel Ángel Pichetto.

CABA. Junto al río, habla Santoro en el lanzamiento porteño del Frente de Todos.

Acuerdos y desacuerdos
Si bien en la coalición oficialista Frente de Todos se pudieron acordar listas únicas en la mayoría de los distritos, los consensos fueron trabajosos y se lograron en el límite del cierre de las presentaciones. Es el caso de la que pretendía formalizar el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni en la segunda sección, o el del acuerdo que se consiguió en Hurlingham, donde, tras la anunciada designación de Juan Zabaleta como ministro de Desarrollo Social de la Nación, se pactó, como contrapartida, el retiro de la boleta promovida por La Cámpora, que ahora se hará cargo de la conducción del municipio. Los heridos por esta decisión susurran que a Zabaleta, en sus pagos, le pasaron factura por su apoyo a Florencio Randazzo en los comicios de 2017.
Menos armoniosas fueron las cosas en la populosa La Matanza, donde de la mano de Fernando «Chino» Navarro y Emilio Pérsico, el Movimiento Evita había conformado una lista a la cual se le impidió participar. Un dato que refleja la conflictividad imperante: en Córdoba, el Evita forma parte de la boleta del gobernador Juan Schiaretti.
En la provincia de Santa Fe, el más grande de los distritos donde la unidad no pudo concretarse, la insistencia de Agustín Rossi en colisionar con el gobernador Omar Perotti crea problemas insolubles. Tanto el presidente como la vicepresidenta avalaron su boleta porque privilegiaron la necesidad de fortalecer el frente oficialista por sobre las diferencias que mantienen con el mandatario. Una situación similar se produce en Tucumán donde confrontan la lista del gobernador Juan Manzur, avalada por Alberto y Cristina Fernández, con la de su vicegobernador Osvaldo Jaldo.
En Entre Ríos, Dolores Etchevehere, militante del Proyecto Artigas, promovido por el dirigente social Juan Grabois, estaba dispuesta a competir en la interna. Cuando faltaban pocas horas para el cierre, decidió bajar su precandidatura y apoyar la lista del Frente de Todos.
Puede constatarse que las próximas elecciones de noviembre, cualquiera sea el resultado de las PASO, consagrarán una renovación profunda en ambas Cámaras legislativas ya que apenas 48 de los 127 diputados que cesan en sus cargos integran las listas, y solo cinco de los 24 senadores que concluyen su mandato podrán aspirar a ser reelectos. Por tanto, es factible que representantes de las nuevas generaciones políticas se hagan cargo de las bancas que hoy ocupan veteranos dirigentes. Ello no implica, por cierto, que esa revitalización se produzca también en lo que hace a las concepciones ideológicas.

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