14 de febrero de 2022
Cuerpo a cuerpo. La batalla contra las llamas.
TÉLAM
El Gobierno de Corrientes estableció el Estado de Emergencia y/o Desastre Agropecuario hasta el 30 de junio, en virtud de la prolongada sequía que sufre la zona y su correlato de incendios forestales que afectaron cerca del 4% del territorio provincial, unas 335.000 hectáreas. «La provincia enfrenta un estrés hídrico que, sumado a las altas temperaturas y la poca humedad en el ambiente, hacen muy difícil el combate del fuego», destacó Alberto Seufferheld, director del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. Si bien en primer término se generó una polémica acerca de la llegada o no de ayuda nacional para combatir las llamas y morigerar la situación, el Ministerio envió aviones hidrantes y otros equipamientos para sumar a los recursos locales. También se sumaron a la batalla contra el fuego brigadistas de Buenos Aires, Jujuy y Santiago del Estero. Los focos alcanzaron, además de zonas de producción agropecuaria, pastizales, malezales, esteros, bañados y bosques nativos.