16 de diciembre de 2021
Estado crítico. Gran deterioro ambiental.
DANIEL CÁCERES
En noviembre, un informe técnico determinó niveles de oxígeno nulos y alta presencia de algas que aumentan la turbiedad y olores desagradables en el lago San Roque, en el valle de Punilla, Córdoba. De acuerdo al Centro de la Región Semiárida del Instituto Nacional del Agua (Cirsa-Ina), el estado crítico tiene lugar cuando la presencia del oxígeno es nula en el total o gran parte de la columna de agua del lago y la transparencia está altamente reducida por la presencia de algas, que ponen en evidencia un fuerte deterioro ambiental. Además, agrega que en la superficie se observan colores marrón rojizo o verdeazulado por floración de microorganismos y hay presencia de olores intensos a «tierra» o «pescado», lo que hace suponer probable mortandad de peces.
Los síntomas de la contaminación del lago están determinados por la presencia de microorganismos (que dificultan la potabilización en la planta que provee el servicio al 70% de la ciudad de Córdoba), y por la eutrofización, que ocurre cuando la materia orgánica aportada por las actividades humanas genera proliferación de cianobacterias y de algas.