11 de diciembre de 2013
El ex dictador Reynaldo Bignone y el ex hombre fuerte de Campo de Mayo, Santiago Riveros, fueron condenados por el Tribunal Oral número 1 de San Martín a penas de 23 y 25 años de prisión por el secuestro y la desaparición del militante montonero Roberto Quieto en el marco del noveno juicio de la megacausa Campo de Mayo. También fueron condenados, junto con otros tres civiles, por las apropiaciones ilegales de Martín Amarilla Molfino y Gabriel Matías Cevasco, nietos recuperados por Abuelas de Plaza de Mayo. Además, tres de los acusados fueron absueltos.
El hijo de Quieto, Guido, quien presenció el secuestro de su padre el 28 de diciembre de 1975 en una playa de Martínez, en la zona norte del Gran Buenos Aires, y que fue querellante en la causa, se mostró «conforme» con la actuación del Tribunal, aunque se quejó porque la demora en el comienzo del proceso judicial implicó que «el ministro del Interior de la dictadura, Albano Harguin-deguy, muriera antes de que comenzara el juicio oral». El juicio comenzó el 17 de octubre pasado y, en la audiencia final, antes de la sentencia, ninguno de los acusados quiso usar su derecho de expresar sus «últimas palabras» al Tribunal.
