14 de noviembre de 2018
Trabajadores de la planta metalúrgica del Grupo Canale, de la localidad bonaerense de Llavallol, permanecían en un acampe pacífico en reclamo por sus fuentes de trabajo y para evitar que la empresa vacíe el establecimiento, lo que impediría convertirse en una cooperativa. La firma elaboraba envases de hojalata para conservas de tomates, legumbres y dulces que se destinaban para la producción de alimentos de otras plantas del mismo grupo en Mendoza y que quebraron en octubre pasado. En la metalúrgica quedaron en la calle 86 operarios. En Tunuyán, Tupungato y San Rafael habían perdido su empleo otros 1.000.