7 de diciembre de 2017
Tras la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reconocer oficialmente a Jerusalén como capital de Israel y reubicar allí su embajada tradicionalmente ubicada en Tel Aviv, diversos líderes del mundo mostraron su descontento frente a la polémica decisión, que fue catalogada, entre otras voces, como amenazante a la paz que buscan Israel y Palestina. Uno de los primeros en reaccionar fue el papa Francisco, quien antes de las declaraciones oficiales de Trump, ya sabiendo cuál sería el pronunciamiento del líder norteamericano, llamó a la «sensatez y prudencia». A la vez, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, el ministro de Asunto Extranjeros de Italia, Angelino Alfano, y la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, condenaron la decisión de Trump. Asimismo, el presidente de Egipto, Abdelfatah Al Sisi, también reprobó la decisión del mandatario estadounidense. A su vez, ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, enfatizó que Ankara condena la decisión de la Casa Blanca.
