Hartos de tanto monopolio

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En Bahía Blanca, un grupo de comunicadores y militantes de organizaciones sociales lleva adelante la emisora cooperativa que busca visibilizar temáticas silenciadas en los grandes medios de la ciudad. Apoyo de la filial local del IMFC.


Vitali. «No pensamos en una radio barrial o marginal, sino un medio para disputar sentido». (Horacio Culaciatti)

Consolidada como cooperativa desde 2006, FM De la Calle fue creada en Bahía Blanca en 1989 por un grupo de militantes de diversos sectores sociales, políticos y culturales con el objetivo de abrir un espacio de comunicación plural y participativa. «No fue pensada como una radio barrial o marginal, sino como un medio para disputar sentido común, tanto en el espectro comunicacional como en la sociedad en general», explica Astor Vitali, locutor, periodista e integrante de la Cooperativa de Provisión de Servicios Culturales de Bahía Blanca, a la cual pertenece la FM. A lo largo de su trayectoria, la 87.9 fue ganando audiencia a partir de una programación alternativa que prioriza los contenidos informativos y culturales que no tienen cabida en otros sitios, contraponiendo ideas y criterios a la uniformidad de los medios locales.
«Hartos ya de tanto monopolio», fue la consigna que sus fundadores lanzaron como contracara a la hegemonía comunicacional ejercida por el multimedio liderado por el diario La Nueva Provincia. «Bahía Blanca es una sociedad de una estructura ideológica compleja –dice Vitali–. Si bien ahora hay más radios y diarios, eso no significa que se hayan democratizado las voces, porque la mayoría dice lo mismo. Por eso, De la Calle sigue siendo la voz de muchos sectores y actores invisibilizados».
Con unos 100 asociados, entre los que se encuentran periodistas, operadores, locutores y miembros de movimientos sociales, la cooperativa bahiense cuenta actualmente con un portal propio de noticias (delacalle.org) y ofrece diferentes servicios culturales. Asimismo, en el espacio que ocupa en el Centro Cultural La Panadería, realiza actividades de capacitación, seminarios, ciclos de debates, espectáculos y dictado de talleres, entre otras propuestas dirigidas a su comunidad.
En abril de 2018 el Estado nacional otorgó la licencia definitiva de la frecuencia LRM 920 a la FM, un logro alcanzado luego de casi tres décadas al aire.

Víctimas y victimarios
Si hay algo que caracteriza a FM De La Calle es la cobertura periodística que viene realizando en la investigación por los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura cívico-militar en Bahía Blanca y en la región. «Cubrimos los juicios desde el principio, tenemos un registro completo de los relatos de las víctimas y también de los victimarios. Nuestra radio visibilizó las complicidades civiles y toda la trama velada que unía a los sectores de poder; sectores que aún hoy siguen ocupando espacios de relevancia», señala el periodista y locutor. Además de esta tarea por los derechos humanos, FM de La Calle se preocupa por divulgar la cultura local y las problemáticas ambientales.
Durante sus casi 30 años de vida, la radio pasó por diferentes situaciones. En la segunda mitad de la década de 1990 sufrió una fuerte retracción, pero gracias al esfuerzo de una nueva camada de integrantes y de sus oyentes, el proyecto comunicacional alternativo pudo recuperarse. Para este fortalecimiento también fue muy importante el acompañamiento de organizaciones sociales de la ciudad, como la filial local del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. «Organizarnos de manera asociativa sinceró la forma en que veníamos trabajando, porque las ideas de la cooperación están en sintonía con el pensamiento fuertemente arraigado que tenemos los integrantes de este proyecto a favor de la economía social. Por otro lado, la gestión cooperativa nos permite ser internamente coherentes con lo que pregonamos hacia a afuera», agrega Vitali. En este sentido, desde su constitución la emisora participó activamente para que se sancionara la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Asimismo, ha consolidado su identidad integrándose a la Asociación Mundial de Radios Comunitarias.

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