La otra forma de ser banco

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En un multitudinario acto realizado en la Ciudad de Buenos Aires, el primero de una serie de celebraciones que se realizarán en todo el país, la entidad festejó cuatro décadas de fecunda trayectoria en compañía de dirigentes, asociados, funcionarios, personalidades de la cultura y de organizaciones sociales.

Valores en movimiento. La cita fue en el complejo Parque Norte y estuvo encabezada por los integrantes de la mesa directiva de Credicoop. (Horacio Paone)

Con la presencia de asociados, personal, dirigentes e invitados especiales, el Banco Credicoop celebró su 40º aniversario. Convocado en el complejo Parque Norte de la Ciudad de Buenos Aires, el acto fue el primero de una serie de festejos que se realizarán en todo el país (ver De norte a sur).
El primer tramo del evento, que reunió a más de 3.000 personas, fue encabezado por la mesa directiva de Credicoop, integrada por Carlos Heller, presidente; Ricardo Sapei, vicepresidente 1º; Horacio Giura, vicepresidente 2º; Carlos Louzan, tesorero; Néstor Callegari, protesorero 1º; Marcelo De Lorenzi, protesorero 2º; Melchor Cortés, secretario; Edgardo Bozzolo, prosecretario 1º y Marta Sitlonik, prosecretaria 2ª. Los acompañaron Gerardo Galmés, gerente general de Credicoop, y Edgardo Form, presidente del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. Entre las personalidades presentes se encontraban periodistas, dirigentes cooperativos, representantes de la cultura y de la política.
Luego de la proyección de un video institucional, donde se reflejó la historia y el fecundo presente del Banco, Mariana Anzorena, conductora del acto, compartió con los asistentes la adhesión de Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, quien señaló en su mensaje: «Quiero agradecer lo que el Banco ha hecho, a lo largo de 40 años, por nuestra institución. Gracias por el amor y por la hermosa voluntad con los que nos han ayudado en muchas oportunidades».
A continuación, tomó la palabra Edgardo Form. «Había que ser muy valientes hace 40 años para crear este maravilloso banco cooperativo. Era un momento extremadamente complejo y difícil y en esas circunstancias hubo que encarar el enorme desafío de exigirles a las autoridades de facto que la Ley de Entidades Financieras incluyera la forma cooperativa», destacó Form. Y continuó: «En esa tarea, el Instituto Movilizador, liderado por el recordado y querido Floreal Gorini, tuvo un rol fundamental. El Instituto tenía la convicción de que era posible y era necesario, a través del sexto principio de la cooperación, la integración cooperativa, sumar todas esas voluntades y afrontar el desafío de constituir un banco», sostuvo. El dirigente transmitió además el saludo del presidente de la Alianza Cooperativa Internacional y titular de la Confederación de Cooperativas de la República Argentina, Ariel Guarco.

Naturaleza democrática
Luego fue el turno de Carlos Heller, quien también recordó los primeros tiempos de la entidad cooperativa haciendo referencia a la Primera Caja Mercantil, fundada en 1918, en el barrio porteño de Villa Crespo. Luego recordó la época de la conformación del Banco, en plena dictadura militar. «En una sociedad que pone al lucro, al individualismo y la meritrocracia en la cima de los valores, crear una entidad como esta era un enorme desafío», dijo.
También repasó el otro gran desafío del Banco en sus comienzos: conservar la forma democrática de funcionamiento. Y destacó en este punto el rol de las comisiones de asociados. «Podemos decir con orgullo absoluto que nuestra entidad tiene 3.721 dirigentes ad honorem. El Banco ha mantenido ese rasgo desde su origen, en cada una de las filiales hay una comisión local administradora, que no tiene límite en su número, que es voluntaria, donde participa todo aquel asociado que tiene vocación de participar».
También recordó los avatares económicos de la Argentina y la política de Credicoop en todas esas crisis, especialmente en la de 2001, cuando los usuarios del sistema financiero se vieron profundamente afectados. El corolario de ese proceso fue el lanzamiento del programa Credicoop y la Comunidad.
El dirigente repasó luego los puntos de la Propuesta Cooperativa del IMFC en sus sucesivas versiones, haciendo hincapié en la coincidencia de muchos de los puntos con las medidas de las administraciones nacionales que gobernaron la Argentina entre 2003 y 2015: rechazo al condicionamiento de organismos internacionales, control de cambios y subsidios por hijo, entre otros.

Ajuste global
En contraposición, repasó las medidas del gobierno de Mauricio Macri. «Aparecieron con todas sus fuerzas las políticas neoliberales, que fueron puestas en el centro de la escena determinando una nueva manera de gestión estatal y de relación con el mundo». Y subrayó como parte esencial del modelo la apertura indiscriminada de la economía. «Bajo el concepto de libre mercado se avanza sobre la idea de que vendrá una ola de inversión privada que generará dinamismo y detrás de ella se va a incrementar el PBI y se van a generar puestos de trabajo y vamos a llegar incluso a la ansiada y reclamada pobreza cero. Un razonamiento que debemos decir que es la teoría del derrame con otro envase». Y afirmó que este proceso se da en un mundo que presenta un escenario de crecimiento débil «y eso, a nuestro entender, significa comprarnos buena parte de los efectos del ajuste global, porque los países centrales están necesitados de colocar su producción y esto va a afectar claramente la actividad interna, sobre todo en un escenario donde se visualiza el abandono de las políticas de fomento al consumo doméstico».
Respecto de la actual coyuntura nacional, marcada por la inminencia de las elecciones presidenciales, Heller resaltó: «Nos sentimos comprometidos a tener posiciones, tenemos que pensar en propuestas y las decimos cada vez que podemos: queremos pelear, contribuir, sumarnos a propuestas que nos lleven otra vez a un país que vuelve a impulsar un Estado presente, que vamos a comprometernos con un proyecto que incluya y distribuya ingresos y no que expulse y concentre riqueza en pocas manos, que sea viable para las pymes y economías regionales y que no esté centrado en la especulación, que incluya laboralmente a todos y todas, que reduzca las brechas en el mercado de trabajo, que garantice la igualdad de género, que privilegie la salud, la educación de sus habitantes, haciendo a un lado la lógica continua del ajuste fiscal».
Para ello, subrayó la importancia de acercar a las nuevas generaciones y de fortalecer el entramado con las más de 10.000 entidades vinculadas al Banco a través de charlas y demás actividades. «Es mentira que el actual es el único camino. Hay otro camino y es mucho mejor, mucho más feliz y nosotros somos parte de él», concluyó el dirigente entre aplausos.

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