7 de noviembre de 2018
El Club Universitario de Buenos Aires (CUBA) votó este martes el proyecto que permitirá, gracias a un 73% del electorado, que las mujeres puedan convertirse en socias plenas del club y dejar de ser «asociadas», nivel que solo obtenían aquellas que eran esposas, hijas o madres de un socio. Así, de un total de 2.256 votantes, 1.648 fueron por el sí. Las opciones eran dos: mientras que algunos defendían que CUBA se mantenga como un club de hombres, los más jóvenes impulsaron la reforma con el argumento de que es un club de universitarios, más allá del género. Fue un momento histórico que concluyó con el aplauso cerrado de la mayoría de los presentes. Sin embargo, el cambio será gradual y todavía seguirán existiendo espacios dentro del club vedados a las mujeres. Por caso, la sede Viamonte seguiría siendo el bastión de la resistencia machista. Allí, ellas solo podrán participar de actividades «sociales y culturales», tal como postula el artículo 68 del estatuto que se intentaba votar en la asamblea de socios. Solo los hombres podrán acceder a los espacios deportivos en la sede central.
