23 de febrero de 2018
«Ahora el problema de la sequía en la zona núcleo nos va a restar de unos 3.000 a 4.000 millones de dólares», afirmó este jueves el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, en referencia al estiaje que afecta desde hace meses a las regiones más agrointensivas del país. Así, la seca impactó a la baja en la superficie sembrada y también reducirá los rindes de la cosecha de soja y maíz. En la soja, parte del efecto negativo por la caída de la producción se vería compensado por la mejora de los precios que desató el deterioro de la cosecha. También hay problemas con las pasturas que complican a la ganadería y lechería. La merma de la cosecha de soja y maíz agrega más presión al déficit comercial que tocó un récord el año pasado. Por su parte, Esteban Copati, jefe de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, explicó que «el escenario es bastante complejo. Hace varias semanas que no registramos lluvias consistentes y las altas temperaturas máximas han acelerado el proceso de deterioro del cultivo en Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y La Pampa».
