El presidente del IMFC firmó un convenio con la Universidad Nacional de La Plata y brindó una conferencia en la Casa de las Cooperativas Federadas. En ese marco analizó desafíos de la actual coyuntura y la necesidad de unir al movimiento solidario.
30 de junio de 2016
Colaboración. Form y Perdomo formalizaron el acuerdo entre el IMFC y la UNLP. (Sebastián Casali)
El presidente del Instituto Movilizador, Edgardo Form, visitó La Plata, donde firmó un convenio de cooperación con la Universidad Nacional de esa ciudad y se reunió con dirigentes cooperativos de la región para analizar la coyuntura política y económica. «Hoy más que nunca, es necesario reforzar el sexto principio cooperativo de integración y trabajo conjunto, mediante la vinculación permanente entre organizaciones de la economía social», señaló el dirigente.
Para rubricar el acuerdo con la universidad local, Form se reunió con el presidente de la UNLP, Raúl Perdomo y con su secretario de Extensión, Leandro Quiroga. El acuerdo pondrá en marcha una serie de actividades conjuntas entre ambas instituciones en las áreas de capacitación, investigación y acción cultural, entre otras. También estuvo presente en el acto de firmas Ricardo Gil, presidente del IMFC La Plata, Laura Sottile, jefa del IMFC platense, Gabriel Ferrero, consejero del IMFC y el presidente de la comisión de asociados de la filial Plaza San Martín del Banco Credicoop, Raúl Cúneo. Tras la reunión, Form explicó que el convenio «va a permitir articular la excelencia académica con la experiencia práctica del movimiento cooperativo y la economía solidaria, en este caso encarnada en el IMFC y una de sus entidades emblemáticas que es el Banco Credicoop». Perdomo, por su parte, manifestó sus expectativas sobre las posibilidades de trabajo conjunto: «Conversamos sobre fuertes oportunidades de crecimiento para las cooperativas en la región, como las de nuestro cinturón hortícola, uno de los más importantes del país».
La jornada continuó con un encuentro organizado por el IMFC La Plata en la Casa de las Cooperativas Federadas, del que participaron dirigentes y trabajadores vinculados con la economía social. Ricardo Gil abrió el panel contextualizando la situación política, social y económica, puntualizando las características de la concentración de la riqueza. «Hay un sistema perverso que concentra aceleradamente», retomó Edgardo Form y trajo a colación las palabras del papa Francisco, cuando en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) definió al capitalismo como un sistema «que degrada y mata».
Así, el presidente del IMFC propuso pensar una economía con mayor equidad. «Para cambiar hay que desplegar la madre de todas las batallas que es la cultural», afirmó, citando a Floreal Gorini. Y resaltó que es necesario «promover otras formas de organizar la economía a nivel mundial». En ese marco, señaló que en la Argentina hay aproximadamente 40 millones de habitantes, y 10 millones están vinculados con el movimiento cooperativo. «Tenemos que reflexionar sobre cuáles son las trabas, los obstáculos para una verdadera integración, porque los poderosos no titubean para juntarse cuando peligra su poder». Así, recordó el marco en que fue sancionada la actual Ley de Entidades Financieras, cuando, con Alfredo Martínez de Hoz a la cabeza, la dictadura argentina aseguró el negocio a los bancos privados. «Para integrar es importante establecer vínculos de confianza, acuerdos colectivos, y eso es posible solo con la acción, el trabajo y el tiempo».
Consultado sobre la situación actual del movimiento, Form dijo que las cooperativas están analizando distintas alternativas ante el aumento de las tarifas, que repercuten directamente en los trabajadores y que «uno de los objetivos prioritarios del IMFC es sostener, preservar y ampliar todos los logros del cooperativismo en estos 120 años en la Argentina». Finalmente, destacó que las 300 cooperativas más grandes del planeta en suma tienen un volumen económico equivalente a lo que sería la octava potencia mundial. «Esto da una idea de que las cooperativas son capaces de constituir empresas que demuestran que es posible organizar la economía de otro modo».
