22 de diciembre de 2017
Luego del triunfo de los partidos independentistas en las elecciones de este jueves en Cataluña, el exiliado expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, pidió una reunión «sin condiciones previas» con el mandatario español, Mariano Rajoy, para encontrar una «salida política» a la situación de la región y lo instó a «retirar» las fuerzas de seguridad federales que permanecen allí desde la intervención de octubre pasado. Desde Bruselas, el destituido líder secesionista se expresó «dispuesto» a reunirse con Rajoy en la capital belga, donde reside, «o en cualquier lugar fuera de España», debido a que pesa sobre él un pedido de detención impulsado por el Estado ibérico. Cabe destacar que, para Puigdemont, la salida a la crisis catalana «es política» y una de las condiciones que puso para retomar el diálogo con La Moncloa fue que el gobierno de Rajoy ordene «retirar a los hombres de negro», refiriéndose a las fuerzas de seguridad, y que el gobierno central «no tome ninguna decisión más» sobre la autonomía catalana.
