Impulsada desde Cooperar, la iniciativa busca incrementar el protagonismo de las entidades de la economía social en las comunidades, a través de alianzas estratégicas con los gobiernos locales. Una manera de resolver problemáticas y fomentar el crecimiento regional.
7 de junio de 2017
Presencia. En Bariloche se destaca la CEB, cooperativa con más de 60 años de vida que brinda el servicio eléctrico en la ciudad rionegrina. (Hernán Villar)
Gobiernos locales que buscan fortalecer el desarrollo de empresas solidarias para motorizar la economía, sostener fuentes de trabajo, brindar servicios públicos y promover acciones conjuntas en pos del bienestar común. Esta es la finalidad de la Red de Municipios Cooperativos (RMC), iniciativa impulsada por la Confederación Cooperativa de la República Argentina (COOPERAR), que busca generar acuerdos entre entidades solidarias y autoridades municipales de todo el país para fomentar el desarrollo local sostenible. Se trata, según sus impulsores, de «un entramado basado en dos características que hacen natural la convergencia de esfuerzos: la democracia y el arraigo territorial, características comunes entre municipios y cooperativas».
«La alianza estratégica con el Estado permite a las entidades de la economía solidaria expresar todo su potencial y, juntos, es posible atender mucho mejor las necesidades, desafíos y proyectos de los habitantes de cada una de las localidades», dijo Ariel Guarco, presidente de COOPERAR, en el lanzamiento de la RMC. Hasta ahora, la integran los municipios de Concepción del Uruguay (Entre Ríos), Tilcara (Jujuy), Venado Tuerto (Santa Fe), San Carlos de Bariloche (Río Negro), Corrientes y Goya (Corrientes), Dos de Mayo (Misiones), General Alvear (Mendoza), Pozo del Tigre (Formosa), 25 de Mayo, Rivadavia, General Pueyrredón y General Viamonte (Buenos Aires), y Villa María, Oncativo y Mendiolaza (Córdoba). La RMC se propone como «ámbito de articulación de los esfuerzos locales, junto con otros actores como las universidades, dirigidos a contribuir con el desafío global del desarrollo sostenible, que está en el centro de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y fue propuesto como eje estratégico por la Alianza Cooperativa Internacional». Ejecutan el proyecto COOPERAR y sus 72 federaciones asociadas, las cuales actúan en cada territorio acompañando el proceso de constitución de cada acuerdo.
General Alvear, ubicada al sur de la provincia de Mendoza, fue una de las primeras localidades en sumarse a la RMC. Tiene una población de 50.000 habitantes y su principal actividad económica es la agrícola-ganadera. Allí, la energía eléctrica es brindada por las cooperativas CECSAGAL (General Alvear) y COSPAC (en la vecina localidad de Bowen), que además brindan agua potable, cloacas, Internet y telefonía celular, entre otros servicios. También existen cooperativas vitivinícolas, de vivienda y una importante cooperativa apícola que trabaja con un convenio con el municipio (que cede un espacio donde funciona su planta de fraccionamiento). «Tenemos, además, cooperativas de trabajo, una de las más destacadas es la cooperativa Anulen Suyai, que gestiona la planta de residuos sólidos urbanos, es decir, opera con un sistema mixto entre cooperativa y municipio. Esta iniciativa fue impulsada por el municipio desde hace varios años. La cooperativa comercializa una parte de lo que separa como cartón», dice el intendente de General Alvear, Walther Marcolini. También funciona en el lugar la Cooperativa de Provisión de Servicios de Enseñanza para Educadores y Agentes Afines a la Educación Universidad General Alvear Cooperativa (UGACOOP). «En el marco de una sociedad altamente cooperativizada –dice Marcolini– ser parte de la RMC para nosotros es primordial. Tenemos un programa de trabajo diseñado en conjunto con las entidades. Uno de los proyectos que estamos promoviendo, y que tiene muchas posibilidades, es que nuestras cooperativas comercialicen con cooperativas de otras provincias que pertenezcan a la red. Otra acción concreta que se puede poner en marcha es el intercambio de capacitación a través de la UGACOOP».
Estimular la organización de empresas solidarias en el ámbito municipal, fomentar el «compre cooperativo» (es decir, priorizar la adquisición de servicios y bienes de la economía social por parte del municipio), la formación de cadenas de valor entre cooperativas y la promoción de los principios y valores solidarios para la mayor visibilidad del sector son algunas de las acciones que la RMC busca promover. La iniciativa destaca, además, la importancia de alentar la organización de círculos de consumidores y proveedurías mutuales, procurando el consumo socialmente responsable. «Esto incluye la consideración de temas ambientales, la protección del trabajo, la compra a los actores de la economía social y la priorización de la oferta local», se afirma en el texto del proyecto. También busca contribuir a la difusión de la educación cooperativa.
«El municipio es la expresión pública, estatal, constituida por voluntad de la ciudadanía para atender justamente las demandas, los requerimientos de la comunidad. Y las cooperativas, sin perjuicio de integrar federaciones o confederaciones de carácter regional, nacional o internacional, también actúan concretamente a nivel local», dice Edgardo Form, vicepresidente de COOPERAR y presidente del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. «En esta tarea de promoción –y con el concepto que enarbola el IMFC y también la conducción de COOPERAR de que las cooperativas son herramientas de transformación social– intervienen a nuestro juicio dos componentes, por un lado la exhibición de la experiencia concreta y exitosa de las empresas cooperativas y paralelamente la prédica de principios, de valores, de la explicación, por ejemplo, de las causas de algunos de los problemas que tiene la sociedad y de cómo a través de la ayuda mutua y la solidaridad estos se pueden enfrentar y resolver», agrega. Más allá de esto, el proyecto de COOPERAR destaca la necesidad de tener claro el principio de autonomía de las entidades solidarias (ver recuadro).
La ciudad campo
Ubicada entre las localidades de Unquillo y Villa Allende, a 25 kilómetros de la capital de Córdoba, Mendiolaza es otro de los municipios que se sumaron a la iniciativa, a través de la filial cordobesa del IMFC. Declarada ciudad en 2012, actualmente su población estimada es de 16.000 personas. «Mendiolaza es porcentualmente la ciudad que más creció en el país en la última década. El motivo principal fue que muchas familias jóvenes con hijos pequeños dejaron la ciudad de Córdoba en busca de seguridad y tranquilidad. Escuchábamos decir a menudo que estaba cerca de Córdoba pero lejos del ruido, por eso nació nuestro lema: “Mendiolaza: ciudad campo”. Tenemos un registro que arroja la cifra del 82% de los nuevos vecinos como provenientes de la capital de Córdoba y el 18% restante de las zonas aledañas», dice Daniel Salibi, intendente del lugar.
General Alvear. CECSAGAL, una de las entidades sociales más importantes de la localidad. (Luis Mania)
El municipio trabajó junto a Sayana, cooperativa de trabajo, para realizar obras públicas en la localidad. «En el caso nuestro, todo surgió por un programa nacional donde los municipios debían promover el armado de cooperativas del lugar. Sayana estaba conformada en Mendiolaza y eso allanó el camino para que todo sea más rápido. Hicimos obras como llevar canalización y agua al barrio El Perchel; un muro de contención en las márgenes del arroyo de la ciudad y también se trabajó en la limpieza de un terreno donado, en donde se entregaron viviendas a los afectados por la trágica inundación de febrero de 2015», enumera Salibi y agrega: «Nuestra idea es continuar trabajando con Sayana y seguir fomentando la constitución de futuras cooperativas, esperando que la situación económica se estabilice en todo el país y podamos iniciar nuevas obras».
Muchas de las medidas que se ejecutarán en 2017 tienen relación con los puntos que figuran en el documento de adhesión a la Red de Municipios Cooperativos. «Nuestro plan de trabajo conjunto con Sayana comprende la remodelación de once plazas y la creación de tres más. Estamos próximos a licitar nuevos cordones cuneta, donde el 30% de la mano de obra que utilice la empresa favorecida tiene que ser de la cooperativa local. También proyectamos la construcción de veredas en el Barrio el Talar, donde está justamente la sede de Sayana. Como Estado tenemos que apostar a esto, que el recurso siga quedando y circule en nuestro lugar».
José Luis Pereyra, tesorero de Sayana, añade: «Realizamos con el municipio de Mendiolaza varias obras esenciales, que mejoraron la calidad de vida de 38 familias del barrio El Perchel; esto fue en el marco de un convenio con la Comisión Nacional de Tierras Para el Hábitat Social, pero consideramos que es importante seguir trabajando junto con el Estado».
Rasgos comunes
La potestad de administrar sus propios recursos y leyes, de la cual los municipios están dotados desde la última reforma constitucional, es clave para poder proyectar iniciativas de este tipo. «Desde 1994 los municipios han dejado de ser entidades geográficas con cierta autarquía y han pasado a ser organismos autónomos con capacidad de administrar y dictarse normativas, siempre y cuando no se contrapongan a las constituciones provinciales. En consecuencia, el municipio cobra una nueva importancia», afirma Ricardo López, secretario de COOPERAR y presidente de la Federación Argentina de Entidades Solidarias de Salud. «Por otro lado –añade–, las cooperativas tienen principios que se imbrican con esto: también son entidades autónomas, tienen gestión democrática donde están sus autoridades con capacidad de ser electas y tienen un principio, el 7°, que se incorporó en 1995, que es de compromiso con la comunidad. En consecuencia, se analizó la posibilidad de vincular aún más a los municipios y a las cooperativas».
Form. «Tanto municipios como cooperativas actúan concretamente a nivel local.»
Salibi. «Como Estado debemos apostar a que nuestros recursos queden en el lugar.»
López. «Hay un doble fortalecimiento: de las federaciones y de las intendencias.»
Marcolini. «Para una ciudad como la nuestra, integrar la RMC es primordial.»
Guarco. «Aliarse con el Estado permite al movimiento expresar su potencial.»
Genusso. «Todo lo que mejore el vínculo con la economía social es un avance.»
La RMC es evaluada por el dirigente como un proyecto «que va a generar un doble fortalecimiento: el fortalecimiento de las federaciones adheridas a COOPERAR, que son las que van a tener que promover el trabajo local junto con las intendencias; y por otro lado, el de las intendencias, que van a poder trabajar en conjunto con las cooperativas para el desarrollo de proyectos locales». A la par, López afirma que se han tomado como base otras experiencias de integración previas (la Red Nacional de Municipios, la Red de Municipios Saludables) y que la RMC viene a potenciar estos antecedentes. «Ya hay intentos de unión por diferentes motivos entre los municipios. Ahora intentamos la integración y el trabajo conjunto entre los municipios y las cooperativas, algo que en muchas localidades ya se está dando y de manera muy importante».
Una de esas localidades es Bariloche, donde el cooperativismo es fomentado desde hace años por el gobierno local. «El cooperativismo dentro de la ciudad tiene un rol muy especial; nosotros fomentamos fuertemente a las cooperativas y tratamos de tomarlas como proveedoras del Estado, les adjudicamos trabajos que tienen que ver mayormente con servicios y obras. A veces tenemos inconvenientes con el estado legal de las entidades y estamos ayudándolas a regularizar esta situación, de manera de darle al movimiento cooperativo una posición fuerte en la localidad», dice el intendente de la ciudad rionegrina, Gustavo Gennuso. Con más de 60 años de vida, la Cooperativa Eléctrica de Bariloche (CEB) es una de las entidades más emblemáticas del sector, que además de energía eléctrica presta numerosos servicios como saneamiento, salud, sistema de cobranzas a entidades intermedias, alumbrado público, instalaciones domiciliarias de Internet, telefonía y televisión. También funcionan en la localidad cooperativas de servicios, de vivienda, de trabajo. Con el fin de articular con otros municipios de la región, se desarrolló también el denominado Mercado Comunitario. Allí, el consumidor compra directamente a los productores, llevando a su mesa y a su familia productos de calidad, bajo la filosofía del precio justo. Asimismo, fomenta la formación de grupos de compra, redes y nodos barriales. «Si bien Bariloche no es una localidad productora de alimentos, nuestra provincia sí lo es, y a partir de eso nos estamos reuniendo con todas las cooperativas de producción en esta zona de la provincia para que sean proveedoras. Es decir, vamos ampliando, vamos armando una red de provisión de la mano de cooperativas», dice el intendente.
Con 140.000 habitantes y un importante desarrollo del sector turístico, Bariloche tiene además la particularidad de ser la ciudad con mayor densidad de científicos y tecnólogos por los importantes polos de ciencia y tecnología instalados allí, como el Centro Atómico Bariloche, perteneciente a la Comisión Nacional de Energía Atómica, y el Instituto Balseiro, de la Universidad Nacional de Cuyo. La ciudad es además sede de Investigación Aplicada (INVAP), empresa argentina que diseña y construye reactores nucleares, radares y satélites. «Esto le da un perfil muy particular, que nosotros queremos que crezca, ya que tiene muchas empresas y actividades asociadas a este desarrollo» señala Gennuso y concluye: «Creemos que todo aquello que mejore la calidad de la relación de las cooperativas con el Estado municipal es un gran avance. Por eso nos parece que integrar la Red de Municipios Cooperativos, en la que confluyen entidades como COOPERAR y la Federación de Cooperativas de Río Negro, va a potenciar todo ese trabajo que venimos haciendo en conjunto, porque el Estado necesita de vínculos y alianzas estratégicas con la cooperativas, y las cooperativas necesitan que se las acompañe desde el Estado en algunos procesos que les permitan llevar adelante de manera eficiente y efectiva su trabajo».
Pueyrredón. Cooperativa El Barrio en sus Puños, de Mar del Plata, realizando obras hídricas. (Juan M. Quintanilla)
Mendiolaza. A 25 kilómetros de Córdoba, es otra de las integrantes de la Red. (Bibiana Fulchieri)
Construir desde el poder público
Este postulado es uno de los puntos centrales del proyecto de la RMC. «Se busca –indica la iniciativa– una profundización de las prácticas democráticas para decidir cómo se consume, cómo se produce, cómo se ahorra, en qué se invierte, cuál es, en definitiva, el tipo de desarrollo que los habitantes del municipio desean construir desde el poder público y desde la sociedad civil. Apostar por la democracia como concepto integral, implica, por lo tanto, apostar por el fortalecimiento a las instituciones de naturaleza democrática». Se sugiere, en resumen, promover a todas aquellas organizaciones que adoptan «modos cooperativos de hacer economía», en base a «una clara preeminencia de las personas sobre el capital, a la autonomía y democracia en la gestión, a la solidaridad tanto interna como externa, a la prioridad de servicios a sus miembros y a la comunidad por encima de la consecución de beneficios».