27 de marzo de 2019
El dólar minorista perforó el techo de los 44 pesos en las pizarras del Banco Nación, el máximo registrado el pasado 7 de marzo, que había marcado el pico durante el gobierno de Mauricio Macri. Se trata de la sexta suba consecutiva de la moneda estadounidense, con la que finalmente alcanzó un nuevo récord, impulsada por la dolarización de carteras por parte de inversores privados, a quienes ya no les alcanza la firme tasa de interés que diariamente convalida el BCRA para frenar la presión cambiaria. Algunos analistas coincidieron en que los riesgos de que el dólar siga escalando a estos niveles son que se acelere la inflación y la caída del salario real, que se complique la sostenibilidad de la deuda pública –donde el grueso está en dólares– y que se licúe el ahorro fiscal por la suba de tarifas de servicios con costos en dólares.
