11 de enero de 2017
Más de 200.000 firmas están repudiando que la directora del FMI, Christine Lagarde, haya sido condenada y eximida de cumplir un año de prisión, en tanto piden que se la juzgue como una «ciudadana común». Aunque la justicia francesa la halló responsable de negligencia durante un arbitraje, terminó liberándola debido a que se trataba de «una figura de prestigio internacional» y era la actual cabeza del organismo multilateral de crédito. El petitorio, organizado por la plataforma change.org y dirigido al presidente Françoise Hollande, entre otros, aduce que «en su forma actual, el sistema democrático está enfermo y pone de relieve la brecha entre políticos y ciudadanos ordinarios». El afiche promocional de la campaña compara los casos de un sin techo, condenado a dos meses de cárcel por haber robado comida, y una cajera, despedida por un error de 5,35 euros, con el de Lagarde, «culpable de conceder a Bernard Tapie 400 millones de euros y dispensada de la pena por ese delito».