Creada a fines de 2010, la cooperativa, integrada por personas de la comunidad LGBTI, se dedica a la alta costura con moldería propia. Entre sus proyectos más ambiciosos, aspira a conformar una federación que represente a las entidades del colectivo.
30 de enero de 2019
Orgullo. El salto cualitativo en la confección es producto de la constante capacitación. (GUADALUPE LOMBARDO)
Es una utopía que construimos día a día». Así define Kalym Adrián Soria (primer varón trans en cambiar su nombre y sexo a partir de la Ley de Identidad de Género) a la Cooperativa de Trabajo Estilo Diversa. «Queremos ser tratados/as como sujetos, con los mismos derechos que el resto de las personas que no son del colectivo LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, intersexualidad)», agrega el impulsor de la entidad.
Estilo Diversa lleva un largo camino recorrido desde que Soria, junto con su esposa, Soledad Pilar Gómez, comenzó a pensar en la creación de un espacio de inserción laboral que contemple la diversidad sexual y encontraron en el cooperativismo la respuesta para viabilizar sus proyectos. «El salto cuantitativo y cualitativo lo dimos cuando nos convocaron para realizar el vestuario para el proyecto Danza por la Inclusión, el cuerpo de baile nacional y federal dirigido por Iñaki Urlezaga –comenta Gómez, presidenta de la cooperativa–. Nos capacitamos, hicimos cursos especiales para aprender a hacer los trajes de ballet».
En los comienzos la textil producía sábanas, banderas, repasadores, diferentes accesorios y prendas simples. «El desfile que hicimos en la Legislatura porteña, en mayo del año pasado, nos sirvió para establecer un nuevo objetivo, que es el de confeccionar ropa de alta costura», dice la titular de la entidad. «Metamorfosis romántica» fue el nombre que se le dio a la colección de vestidos de novia y de noche que diseñó, confeccionó y presentó Estilo Diversa. «La idea que nos inspiró fue la transformación y la construcción, algo que tiene mucho que ver con la vida de las personas trans. Si bien lo romántico no es lo que está de moda, nosotros quisimos darle esa impronta como una forma de reivindicar al colectivo. Por eso pusimos mucha puntilla, encaje y flores», explica Soria. Además de producir toda la moldería, acorde con las medidas antropométricas de la población trans, el gran desafío de la cooperativa fue que las prendas fueron confeccionadas por personas sin experiencia. «Para todos los proyectos nos tomamos tiempo para la capacitación y la formación», agrega.
Sin discriminación
«La diferencia de trabajar en la cooperativa es que todos y todas nos sentimos parte de este espacio, no hay discriminación», dice Ezequiel Ontivero, varón trans, otro de los integrantes de la cooperativa. La asociada Kimberly Manchego Acuña, en tanto, señala: «Soy una chica trans, hace dos años estaba en situación de encierro y cuando llegué acá, enseguida me ayudaron para que me perfeccione en la costura».
Afra Nerea Galván, oriunda de Santiago del Estero, contó siempre con el apoyo de su familia. Cuando se trasladó a Buenos Aires trabajó en diferentes lugares hasta que se acercó a Estilo Diversa. «Me recibieron con los brazos abiertos y me dijeron que podía aprender. Después de pasar por las máquinas descubrí que quería dedicarme al diseño y el embellecimiento de las prendas: bordado, aplique de accesorios, flores de tela», comenta. «Acá lo que más te ata es el vínculo que se genera entre compañeros y compañeras», agrega.
Para expandir su experiencia y aunar fuerzas, los y las integrantes de Estilo Diversa están impulsando la conformación de la Federación de Cooperativas de la Diversidad (FECODI). «Queremos visibilizar y resolver las necesidades particulares del colectivo de la diversidad sexual. La falta de atención de la salud, vivienda digna, educación, trabajo genuino, empujan, en muchas ocasiones, a travestís y transexuales, a la prostitución como única alternativa para sobrevivir. Estas son algunas de las problemáticas que queremos resolver desde ese nuevo espacio», señala Gómez. «Estamos enamorados del cooperativismo y creemos –concluye Soria– que la federación vendría a darnos la posibilidad de incidir con mayor fuerza en las políticas públicas».