13 de marzo de 2014
Después de oír hablar durante mucho tiempo en los medios sobre los famosos «drones», me decidí por fin a averiguar de qué se trataba, ya que apenas tenía idea de que era algún tipo de avión y no más que eso. Fue así que vengo a enterarme de que ya desde hace muchos años algunas potencias mundiales, especialmente Estados Unidos, vienen utilizando un tipo de avión, pequeño, no tripulado, que es manejado por control remoto desde una base en tierra utilizando satélites en órbita como enlace.
Al principio parece que sólo eran utilizados más que nada para tomar fotografías, a modo de aviones espía, de los territorios, campamentos y bases militares de las naciones enemigas (de Estados Unidos, claro), de modo de no poner en riesgo la vida de pilotos en acciones que no eran decisivas. Sin embargo, con el tiempo los fueron perfeccionando y ahora se han convertido en un poderoso instrumento de guerra, capazde lanzar misiles de todo tipo. Claro que no siempre los drones son tan efectivos y para desgracia de las víctimas a veces pueden errar su objetivo militar y matar civiles que nada tenían que ver con «terroristas», como ha ocurrido muchas veces en países como Yemen, Somalia, Pakistán o Afganistán. Estas acciones del gobierno estadounidense, como tantas otras veces en tantos otros países del mundo a lo largo del siglo pasado y en lo que va de este, se han cobrado miles de víctimas inocentes. De nada ha servido que la Organización de las Naciones Unidas censurara fuertemente al gobierno de Obama. Lo único que ha venido haciendo el presidente premio Nobel «de la Paz» es recargar la responsabilidad en los mandos militares del Pentágono, como si no dependieran de él. Me pregunto si no será efectivamente así en realidad.
Sebastián Almada
Ciudad de Buenos Aires
