6 de diciembre de 2021
La plazoleta que cruza sobre el predio donde funcionó la Unidad Penal N° 1 de Caseros, en Parque Patricios, demolida en 2007, llevará los nombres de Schiavoni Ormaechea y Toledo Vivas, dos militantes muertos en dicha cárcel durante la dictadura y será señalizada como sitio de memoria. La Unidad Penal N° 1 de Caseros fue un sitio de reclusión de presos políticos a lo largo de las sucesivas dictaduras cívico-militares que tuvieron lugar en el siglo XX en nuestro país. En el edificio inaugurado por la última dictadura (1979) estuvieron presos cientos de militantes políticos, sindicales y sociales puestos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional, muchos provenientes de distintos centros clandestinos de detención a lo largo del país. Las condiciones de detención, la prácticamente nula atención médica y la violencia propiciada por los agentes penitenciarios generaron una situación de permanente tortura psicológica sobre los presos políticos.