30 de junio de 2022
Ante la insuficiencia del combustible, el Gobierno aplicó medidas que, sin embargo, requieren tiempo para su concreción. Cortes de ruta de patronales transportistas.
Demanda creciente. Para satisfacerla el Gobierno impulsa la importación del fluido y eleva el corte de biocombustibles.
TÉLAM
En un contexto de escasez de gasoil, por mayor demanda de la agroindustria y de privados que buscan aprovechar el diferencial de precios para un combustible subsidiado, el Gobierno aplicó dos medidas concretas, pero que llevan tiempo para su aplicación: elevar el corte de biocombustibles e importar un mayor cargamento del fluido. Sin embargo, la impaciencia propia de los tiempos de producción y las presiones políticas de un sector concentrado de la economía, que se montan sobre esta problemática, se reflejó en en distintas medidas de protesta, de quienes se enfocan en rechazar los valores de referencia para el gasoil.
«El Ministerio de Transporte propicia el encuentro entre los transportistas y los dadores de carga para discutir las tarifas de referencia. No está atado un dador de carga y un transportista a aceptar un monto de tarifa. Son de referencia», aseguró el ministro de Transporte, Alexis Guerrera.
Por la falta de gasoil y los sobreprecios, esta semana transportistas auto-convocados realizaron cortes de rutas en varios puntos del país, incluido uno total de todo el día en la autopista Buenos Aires-La Plata, y una importante movilización hasta el Obelisco porteño. En uno de los cortes, en la zona de Daireaux, se produjo un incidente que culminó con la muerte de un camionero, Guillermo Jara, que sorteó el bloqueo, fue perseguido y le arrojaron una piedra, tras lo que terminó con el camión fuera de la ruta y perdió la vida. Hasta el momento, hay tres detenidos por el hecho.
El panorama actual está generando la movilización de productores en zonas del norte del país. En este contexto de faltante del fluido, la multinacional alimenticia Nestlé advirtió a los tamberos que le proveen leche que es posible que en los próximos días pueda «comenzar a tener inconvenientes» en la logística de recolección de la materia prima de los establecimientos. El Gobierno estima que el problema debería comenzar a estabilizarse en las próximas semanas, luego de que elevara el corte de combustibles vegetales (biocombustibles) en el gasoil, llevándolo de 5% a 12,5%, a partir de la incorporación de aceite de soja. El aumento en el corte implica una mejora para las pymes productoras de biodiesel. Sin embargo, esto tiene el riesgo –por eso se había reducido el corte anteriormente– de encarecer el combustible por el mayor impacto del precio de la oleaginosa en el total de la producción de gasoil.
El segundo paso oficial es incrementar la importación de gasoil, pero el arribo de los barcos con el combustible demorará al menos dos semanas y se espera que en julio esté normalizada la situación. El jefe de Gabinete, Juan Manzur, en una reunión en Casa Rosada les confirmó a industriales del NOA y NEA que «están los dólares que hagan falta para importar el gasoil necesario».
Capacidad productiva
Los volúmenes vendidos en el mercado de gasoil durante el primer cuatrimestre de este año superaron en más de 580.000 metros cúbicos a los del mismo período de 2021. En ese marco, las importaciones superaron en más de 530.000 metros cúbicos (112%) a las realizadas el año anterior, superando el millón de metros cúbicos y promediando 250.000 metros cúbicos por mes.
«Entiendo, por lo que me explican desde YPF y desde la Secretaría de Energía, que con la llegada de nuevos barcos, habiendo incrementado lo planificado a principios de año, que en los próximos quince o veinte días estaría solucionado el problema. Incluso estaría garantizada la provisión de gasoil para los laboreos necesarios para la agroindustria», detalló Guerrera.
Hay tres claves que explican la escasez en Jujuy, Tucumán, Salta, Formosa, Misiones y Corrientes: el acopio para el invierno ante el faltante de gas, el atraso del precio que no tiene relación con la demanda, y problemas logísticos. Una de las razones tiene que ver con que se proyecta que el suministro de gas va a estar muy justo en el invierno y esta situación provocó un acopio anticipado de gasoil por parte de industrias, productores y distribuidores para los meses más fríos del año, junio, julio y agosto.
Por su parte, el ministro de Transporte enmarcó la situación en la crisis internacional. «Pensemos que en este momento la puja internacional para la obtención del gasoil es muy fuerte y por eso los precios se han disparado. Argentina no es el único país que está pujando en el mundo para la compra de gasoil. Los barcos están llegando; no, a lo mejor, con el ritmo necesario para el consumo interno», explicó Guerrera.
Ese ritmo compromete el avance de la cosecha de maíz y siembra de trigo, dos de los eventos económicos más importantes del año. Con varias semanas por delante para concluir los trabajos, la escasez del combustible complica las labores y logística del sector. El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, aseguró ante la Comisión de Agricultura de Diputados que «no va a faltar el gasoil para la siembra ni para la cosecha» y anunció para los próximos días la llegada de tres buques cargados con gasoil. Sin embargo, la Mesa de Enlace, que nuclea a las cuatro entidades agropecuarias tradicionales, convocó a una medida de fuerza para el 13 de julio.